La activista sueca Greta Thunberg, de 16 años, ha zarpado este miércoles desde el puerto de Plymuth, al sur de Inglaterra, rumbo a Estados Unidos, para acudir a una serie de reuniones y protestas sobre el cambio climático. Greta se negaba a viajar en avión por las altas emisiones de CO2 de las aeronaves. El yate de carreras 'Malizia II', capitaneado por el alemán Boris Herrmann y el monegasco Pierre Casiraghi, que no estuvo en la presentación a los medios previa a la salida, trasladará a la joven activista a América junto con su padre.

La embarcación genera toda la electricidad que consume por medio de paneles solares y turbinas bajo el agua, pero no cuenta con baños a bordo y tan solo un estrecho espacio para dormir, según Herrmann. El padre de la ecologista sueca, Svante Thunberg, y el cineasta Nathan Grossman también se unen al primer viaje náutico de Thunberg, cuya duración dependerá de las condiciones climáticas pero rondará las dos semanas.

Thunberg planea asistir a la Cumbre sobre la Acción Climática de Naciones Unidas en Nueva York el 23 de septiembre y a dos protestas sobre cambio climático los días 20 y 27 de ese mes. Además, visitará Canadá y México antes de asistir en diciembre a la Conferencia sobre Cambio Climático de Naciones Unidas en Chile.

Greta Thunberg comenzó hace un año unas protestas semanales frente al Parlamento de Suecia bajo el lema 'Fridays For Future' (Viernes por el Futuro), para exigir a los gobernantes que escuchen a los jóvenes y sus demandas de acción contra el cambio climático. El movimiento se fue extendiendo por otros países y ya es reconocido como una campaña internacional.