Antonio García Ferreras mostró ayer su lado más sensible al recibir el premio Cambio 16 en la categoría de periodismo. Los espectadores de La Sexta y especialmente de su programa, Al rojo vivo, están acostumbrados a ver a un periodista enérgico, crítico y con mucha fuerza. En esta ocasión, sin embargo, Ferreras no pudo contenerse y mostró su rostro más íntimo.

Su propio programa, esta vez liderado por Cristina Pardo, ofrecía las imágenes de su presentador recibiendo el premio. El momento cúspide del discurso llegó cuando el periodista se acordó, visiblemente emocionado, de su mujer, Ana Pastor. Entre lágrimas, dijo: «Este premio o este abrazo es para ella. Es un momento muy intenso para nosotros. Por su infinita capacidad para la bondad, porque me rodea con su inteligencia, porque me sujeta y porque cada día se sobrepone a las amenazas y al terror. Es para ti, gracias».

Pastor está pasando unos momentos duros. En los últimos días, ha recibido amenazas de muerte a través de las redes sociales, y no es la primera vez.