Hace poco más de una semana, en Londres, Josep Font salía a saludar tras su desfile para la próxima temporada primavera verano 2019 como director creativo de Delpozo. Será su última aparición en la pasarela, al menos durante en un tiempo. El diseñador nacido en Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona) hace 51 años, deja la firma después de seis años y 12 colecciones memorables que han logrado enamorar a clientas y a la crítica internacional, primero en Madrid, después de Nueva York y, desde hace un par de años, en la capital londinense, donde la firma abrió una de sus tiendas insignia.

"Gracias Delpozo por estos seis maravillosos años. Me he sentido como en familia y estoy muy orgulloso de todas las cosas que hicimos juntos". Así de breve se ha despedido Font desde su cuenta de Instagram junto a una foto de una mesa vacía en blanco y unas flores blancas. Una nueva sorpresa en el mundo de la moda que asiste estos días también a la posible compra de Verscace por parte de la norteamericana Michael Kors.

Font llegó a Delpozo en el 2012, tras el fallecimiento del diseñador Jesús del Pozo, avalado por su increíble sensibilidad y su gusto elegante y refinado, que le llevó en el pasado incluso a desfilar con su firma en la alta costura de París. En estos años, contratado por el grupo empresarial Perfumes y diseños, con Pedro Trólez al frente, ha logrado el encargo de internacionalizar la firma. De ahí el empeño en saltar a pasarelas como Nueva York y Londres y conquistar mercados como Estados Unidos -Melania Trump, Michelle Obama o Cate Blanchett han llevado sus vestidos-, Reino Unido y Dubái. La firma factura alrededor de cuatro millones de euros y la mayor de la producción se exporta fuera.

En el comunicado oficial de la marca, Pedro Trolez, presidente de Delpozo, señala: "Josep ha sido una figura clave para el relanzamiento de Delpozo. En estos seis años ha contribuido a rejuvenecer la marca y continuar el legado de Jesús, su fundador. (…) Estoy agradecido por su lealtad y por haber formado parte de esta primera etapa de Delpozo”. De momento no se conoce quién le sustituirá.

En una declaraciones recientes a la revista del grupo Zeta 'Port', donde fue portada, Font, una persona introvertida y discreta, aseguraba que el ritmo de trabajo de presentar dos colecciones completas -con hasta 200 piezas cada una en la versión comercial, con estampados propios y patronajes diferentes cada vez - en un año y de estar todo el año arriba y abajo era algo endemoniado. Ahora su intención es tomarse un tiempo, aunque seguro que pretendientes no le faltan. Hace unos años, sus problemas con su socia capitalista, Carmen Ayats, le obligaron a ceder su propio nombre. Esa situación que él vivió con mucha tristeza también podría cambiar.