El cineasta Ridley Scott ha decidido eliminar a Kevin Spacey de su próxima película, All the Money in the World, que ya estaba acabada y que se debía estrenar el próximo 22 de diciembre, y reemplazarlo con el veterano actor canadiense Christopher Plummer, quien rodará sus escenas en las próximas dos semanas. Según informó el blog especializado Deadline, Scott y el estudio Sony han tomado esa drástica decisión con el objetivo de que la cinta no vea afectada su fecha de estreno, que corría riesgo de verse retrasada por el escándalo de acoso y abusos sexuales que rodea a Spacey.

«Plummer reemplazará a Spacey, el equipo de rodaje ya está trabajando en las nuevas escenas», porque la intención es que esta película de TriStar (Sony Pictures) mantenga su fecha de estreno (prevista para el próximo 22 de diciembre), explicaron fuentes cercanas a la productora, quienes consideran complicado el reto de estrenar en poco más de un mes, pero factible. «Si alguien puede lograrlo, ese es Ridley Scott», afirmaron.

EN EL PAPEL DE JOHN P. GETTY / Spacey encarnaba en la película al multimillonario John Paul Getty, un papel secundario y breve pero decisivo en la trama, del que ahora se encargará Plummer. El estudio Sony había orquestado una fuerte campaña publicitaria de cara a los Oscar con Spacey como reclamo dentro de la categoría de mejor actor de reparto, pero, según informó recientemente la revista Variety, esos planes se desestimaron en cuanto se conocieron las acusaciones.

Mark Wahlberg y Michelle Williams, los protagonistas de All the Money in the World, también estarán involucrados en el rodaje de estas nuevas escenas. Según fuentes consultadas por la publicación, la maniobra es viable, ya que muchas de las escenas del personaje de Getty transcurrían en solitario.

El pasado lunes, los responsables de la película decidieron cancelar el estreno previsto en el festival AFI de Los Ángeles (EEUU), donde iba a ser la película elegida para el cierre del certamen. Sin embargo, el estudio Sony optó por retirarla ya que no quería que la polémica en torno a Spacey empañara el lanzamiento del filme y el trabajo del resto del equipo. El largometraje, basado en hechos reales, narra el secuestro del nieto del magnate John Paul Getty. Este nuevo giro prolonga el gran escándalo que rodea a Spacey, doble ganador del Oscar, cuya carrera y reputación están en la cuerda floja tras las graves revelaciones de agresión sexual conocidas en su contra.

Después de que el actor Anthony Rapp denunciara a Kevin Spacey por un incidente que, presuntamente, ocurrió durante una fiesta nocturna en el verano de 1986, cuando la víctima tenía 14 años, se han unido ocho trabajadores y exempleados de la serie House of Cards, el intérprete mexicano Roberto Cavazos y el director Tony Montana para dar a conocer el enorme historial de episodios de abuso o acoso sexual del protagonista de Sospechosos habituales (1995) y American beauty (1999).

Spacey pidió perdón a Rapp y aseguró posteriormente que buscará ayuda y tratamiento de especialistas. Sin embargo, la plataforma Netflix decidió romper lazos con el actor, tras suspender temporalmente el rodaje de la sexta temporada de House of Cards. La plataforma baraja matar al personaje de Spacey (Frank Underwood) en la serie para salir adelante.

NUEVAS ACUSACIONES / Pero estas acusaciones de abusos no parecen haber acabado. Así, el pasado miércoles, la expresentadora de televisión Heather Unruh acusó a Kevin Spacey de haber abusado de su hijo cuando éste tenía 18 años.

En una rueda de prensa celebrada en Boston (EEUU) y en la que no pudo reprimir las lágrimas, Unruh aseguró que Spacey abusó de su hijo en julio del 2016 en un bar de la isla de Nantucket, situada frente a la costa del estado de Massachusetts. «Mi hijo no tenía ni idea de que el famoso actor era un supuesto depredador sexual y de que se iba a convertir en su próxima víctima», afirmó la presentadora. Según el relato de Unruh, Spacey invitó a su hijo a «una copa tras otra» hasta que se emborrachó. Posteriormente, el actor le introdujo la mano en los pantalones y le agarró de los genitales. Su hijo no tenía edad legal para beber, pero sin embargo aseguró al intérprete que tenía más de 21 años. «Fuera o no mayor de 21 años, Kevin Spacey no tenía derecho a agredirle sexualmente. No hubo consentimiento», explicó.

Su hijo logró escapar del bar cuando el actor fue al baño. Unruh condenó lo que Spacey hizo a su hijo y criticó al actor por proclamar públicamente que era homosexual a modo de disculpa ante la denuncia de Rapp. «Fue un intento terrible de desviar la atención de lo que eres: un depredador sexual. Tus acciones son criminales», dijo.