David Beckham fue condenado ayer por un tribunal de Londres a una suspensión de seis meses de su licencia de conducir por usar su teléfono móvil mientras estaba al volante de su coche. El excapitán de la selección inglesa, que tiene en la actualidad 44 años, reconoció los hechos ante el tribunal. La infracción de tráfico ocurrió en noviembre del 2018 y, al parecer, no fue descubierto ni por agentes de policía ni por cámaras sino que fue denunciado por un testigo. El exfutbolista también ha sido multado con 750 libras (869,50 euros) y la retirada de seis puntos, según informaciones del Tribunal de Magistrados de Bromley. La estrella del balón se declaró culpable por correo en noviembre pasado después de que dicho testigo le viese conduciendo su Bentley en Great Portland Street, en Londres. La audiencia aplazó a ayer la lectura de la sentencia para que el marido de Victoria Beckham pudiera asistir.