La Comisión de Control, Ética y Disciplina de la UEFA sancionó ayer con cuatro partidos al entrenador del Atlético de Madrid, Diego Pablo Simeone, uno de los cuales ya cumplió el jueves, por su expulsión en el partido de ida de las semifinales de la Liga Europa contra el Arsenal el 26 de abril.

Simeone fue expulsado por el árbitro francés Clement Turpin en el minuto 13 de aquel encuentro, por protestar airadamente a este tras una falta sobre Lucas Hernández, tres minutos después de la expulsión por doble amarilla del croata Sime Vrsaljko.

El técnico argentino también tendrá que pagar una multa de 10.000 euros y no podrá dirigir a su equipo en la final el día 16 en Lyon, contra el Olympique de Marsella, según indicó la UEFA. De mantenerse la sanción, Simeone no podrá dirigir a su equipo en sus dos siguientes compromisos europeos. En caso de ganar la Liga Europa se perdería la Supercopa de Europa el 15 de agosto en Tallin y la primera jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones el 18/19 de septiembre.

Además de la sanción a Simeone la comisión disciplinaria de la UEFA impuso otra multa en la misma cuantía al Atlético por lanzamiento de objetos en aquel encuentro disputado en el campo del Arsenal en Londres (1-1).Horas después del choque la UEFA anunció la apertura de un expediente disciplinario al Atlético por conducta impropia de su entrenador e insultar a un oficial de partido.

En el mismo procedimiento la UEFA responsabilizó al Arsenal inglés de encendido de bengalas, aunque no ha decidido ninguna sanción..

La expulsión en Londres impidió ya a Simeone dirigir a su equipo en el encuentro de vuelta de las semifinales y tener cualquier tipo de contacto con sus jugadores, por lo que su segundo, Germán Mono Burgos, fue quien se sentó en el banquillo.

El Atlético certificó en su estadio la clasificación para la final de la Liga Europa tras imponerse al equipo de Arsene Wenger (1-0) con un gol de Diego Costa.