Neymar ha regresado este lunes a los entrenamientos con el PSG, en medio de un clima enrarecido porque su club lo esperaba desde hace una semana y por sus recientes comentarios sobre la "remontada".

El 'crack' brasileño acaba de lanzar un ataque a su actual club, que le ha tasado, más o menos, en 200 millones de euros (lo compró por 222 al Barça), al reconocer, públicamente, en su último acto en Brasil antes de viajar a París, que su momento más feliz “fue cuando, con el Barça, eliminamos al PSG de la Champions”.

Toda la prensa francesa salió en tromba contra las palabras de Neymar y considera que “es, sin duda, una respuesta calculada, pues es imposible pensar de otra manera”. Según 'France Football', "al PSG no le quedará más remedio que buscarle un comprador".