El culebrón del fichaje de Neymar encuentra a diario nuevos giros e incorpora protagonistas, con finas filtraciones aquí, en Madrid y en París, para añadir más incertidumbre que claridad sobre cuál va a ser finalmente su destino. Como si el culebrón fuera un espejo del mismo Neymar, todo parece a expensas de infinidad de caprichos, empezando por el jugador, cansado del París SG como si fuera un juguete gastado.

Neymar es a la vez un capricho reconvertido en necesidad perentoria por el presidente del Barça, Josep Maria Bartomeu, aparentemente empeñado en llenar de galácticos la delantera del equipo. Por ello parece que se plantea enviar una oferta al club parisino consistente en pedir una cesión remunerada (falta conocer la cantidad) con una compra para el 2020 (falta saber si obligatoria o no).

Como orientación de la oferta que se le puede plantear al PSG conviene recordar que la cláusula de rescisión del brasileño en el 2020 desciende a los 170 millones, una cifra aún escandalosa para un futbolista tan extraordinario como propenso a las lesiones y a la vida alegre. Al final de la presente temporada contará con 28 años y dos temporadas más en su contrato.

Desde París se dejó entrever el escepticismo del club francés ante la supuesta propuesta de cesión con opción de compra. «Estamos abiertos, pero la cuestión no es la fórmula, sino que se satisfagan las condiciones financieras que pedimos», indicó una fuente del PSG citada ayer por L’Équipe. Le Parisien, bien conectado con el club, daba por hecho que la hipótesis de un préstamo de Neymar al Barça con opción de compra «no tiene ninguna opción de ser aceptada».

Aun así, el ruido alrededor del brasileño proseguirá hasta, todo apunta, el mismo 2 de septiembre, fecha de cierre del mercado. El relato se alimenta entre tanto con el supuesto interés de Florentino Pérez y la creencia desde los medios de Madrid de que la prospección azulgrana podría no ser más que un farol, una representación teatral, ya sea para encarecer el fichaje de los blancos como para contentar a Messi. Ya llegará el momento oportuno, se considera desde la casa blanca, para lanzar la mejor oferta para atraer al brasileño junto a Hazard, un escenario que en el club azulgrana se teme sobremanera.

En la puja comparece también el Juventus, que resulta tener tanto interés en desprenderse de Dybala como con hacerse con Neymar. Dinero y un delantero como el argentino que supliría al brasileño será su oferta, según los medios italianos.