Seis 'poles positions' consecutivas, pero solo una victoria en toda su carrera. Esa es la extraña historia de Lewis Hamilton en el Gran Premio de Australia, lque hoy ha abierto el Mundial de F-1 con victoria aplastante del finlandés Valtteri Bottas y ridículo sonado, muy sonado, de Ferrari. La prueba inaugural de 2019 no fue diferente a lo vivido hasta ahora por el campeonísimo Hamilton en Mebourne y el chico de Stevenage vio, de nuevo, cómo la victoria se le escurrió entre los dedos en una mala salida y un estrategia que no le favoreció. Ganó Bottas en el primer doblete de la temporada para las 'flechas de plata'.

Todo se decidió en la salida. Bottas completó una gran arrancada incluso por la parte sucia y arrebató el primer lugar a Hamilton, Charles Leclerc (Ferrari) también arrancó mejor que su (teórico) jefe de filas, Sebastian Vettel, pero el tetracampeón del mundo arrinconó a su joven compañero en la curva dos hasta el límite de casi tocarse. En cualquier caso, el ritmo de los Ferrari nunca inquietó a Mercedes, incluso fueron superados por el Red Bull de Max Verstappen. El adelantamiento de Mad Max a Vettel fue lo mejor del gran premio. "No es nada fácil adelantar en este circuito a un Ferrari, dijo el holandés y la mejor forma de firmar el primer podio de Honda en su regreso a la F-1, el primer 'cajón' en el estreno de la alianza entre Red Bull y el motorista japonés.

Bottas, que no había ganado ninguna carrera en el 2018 y solo en una ocasión recibió órdenes de equipo y hoy ha estrenado la temporada con una victoria inapelable que labró en una gran salida, y consolidó con un espectacular ritmo de carrera. Ha sido la mejor carrera de mi vida. Fue una slida increíble, el coche funcionó a la perfección, dijo el finlandés. La estrategia también le favoreció. Ferrari hizo parar a Vettel en aquel momento tercero muy pronto, para buscar un undercut sobre Hamilton, lo que obligó a Mercedes a copiar la estrategia con Hamilton. Por qué me habéis parado tan pronto?, preguntaba por radio el inglés. No creo que pueda acabar la carrera con estos neumáticos, confirmaba.

Esa temprana parada de Vettel y Hamilton les complicó el final de carrera. Leclerc, con un neumático mucho más fresco (se detuvo 10 vueltas después) se pegó al alerón trasero de Vettel a ocho vueltas del final. Hamilton, que había perdido cualquier contacto con Bottas, solo se ocupaba ya de los retrovisores donde aparecía Verstappen. Lo tenía controlado, pero ser segundo no era lo que quería. En cualquier caso, el equipo hizo un gran trabajo, hemos tenido un principio mejor de lo esperado, pero yo tengo que trabajar mas con mis ingenieros, desveló Hamilton. El margen de Bottas resultó tan abrumador que se dio el gustazo de marcar la vuelta rápida en el último giro y anotarse un punto más que el reglamento otorga como novedad este año. En Ferrari, Leclerc recibió la orden por radio de no atacar a Vettel, aunque el tetracampeón ya sabe lo que le queda el resto de temporada.

Por detrás, Kevin Magnussen, con Haas, fue el primero del grupo medio, por delante del Renault de Nico Hulkenberg. A esa lucha no se pudo sumar Carlos Sainz. El madrileño estaba en plena remontada del 18 al 14 en 11 vueltas , con el objetivo de llegar a los puntos, cuando el motor Renault del McLaren estalló en humo y llamas. Es una pena. Estaba atacando a Strolz que acabó en los puntos, así que finalizar en los puntos era posible. Decepcionado por toros los problemas, pero contento con las posibilidades del coche, dijo el madrileño.