Los equipos del Mundial de Fórmula Uno, con Ferrari como el equipo a batir, afrontan hoy y el viernes en el Circuito de Montmeló las cuatro últimas jornadas de entrenamientos de pretemporada con el objetivo de acumular kilómetros que les permita llegar de la mejor forma posible a la primera cita del año, el Gran Premio de Australia del 15 al 17 de marzo.

Ferrari se presenta como el mejor de ellos. Fue la semana pasada el equipo que se mostró más en forma. Marcó el mejor tiempo los dos primeros días y después se dedicó a hacer simulaciones de gran premio hasta completar un total de 598 vueltas, sólo por detrás de las 610 de Mercedes, el equipo más activo de la parrilla.

EL SF90 DE FERRARI, FIABLE

Esos cuatro primeros días el SF90 evidenció ser fiable y superior a sus rivales mientras estuvo en la pista. Tanto el tetracampeón alemán Sebastian Vettel como el monegasco Charles Leclerc destacaron lo cómodo que era conducir el coche y lo fácil que era sacarle todo el rendimiento. Esta semana los dos pilotos de Ferrari cambian de estrategia y rodarán los cuatro días, uno por la mañana y otro por la tarde.

Mercedes, el gran dominador del mundial los cinco últimos años, no dio muestras de la habitual autoridad, aunque aún no ha jugado todas sus cartas. El británico Lewis Hamilton y el finlandés Valtteri Bottas dedicaron los cuatro días a acumular kilómetros y aún tienen que desvelar su verdadero ritmo a una vuelta con el compuesto de neumáticos más blando. Esperan hacerlo esta misma semana.

RED BULL ESTRENA MOTOR

Red Bull, que estrena motor (Honda), completó 475 giros al trazado barcelonés y tuvo una semana sin sobresaltos reseñables en manos del holandés Max Verstappen y el francés Pierre Gasly. La gran revelación de la primera semana de test fue el equipo Alfa Romeo-Ferrari (antes Sauber), que fue el tercero en vueltas completadas (507) con su nueva pareja de pilotos: el finlandés Kimi Raikkonen, que fue el cuarto más rápido del total de cuatro días, y el italiano Antonio Giovinazzi. Toro Rosso-Honda también evidenció haber hecho un buen trabajo.