Es la segunda carrera de la temporada. Han transcurrido 15 días desde la primera cita en Australia y en McLaren han tenido tiempo para instalar en el coche “algunas piezas que deberían haber estado en Australia y que nos darán equilibrio porque estaban pensadas para un mismo paquete aerodinámico y, en Melbourne, tuvimos que hacer compensaciones con el 'set up', a la antigua”, explica Eric Boullier, jefe de McLaren.

El McLaren será mejor, sin duda, pero Fernando Alonso tendrá más difícil llegar a la quinta plaza que dos semanas atrás en Albert Park. El asturiano otorga a su equipo un tiempo “más o menos de dos meses”, para que su coche comience a funcionar como preven. “Ahí podremos saber si podemos luchar con los tres de arriba”. De momento en Baréin, la guerra será más con “Haas y Renault”, aunque siempre mira hacia arriba: “el podio es posible”.

Los primeros, aún lejos

En 2017 se produjeron dos adelantamientos en el GP de Australia. Este año, tres. La pírrica cifra da una idea de lo complicado que es rebasar un coche en Albert Park. Eso enmascara, en ocasiones, el verdadero potencial de los equipos, de los pilotos. Este fin de semana en Baréin se prevén alguno más de los 36 adelantamientos que se produjeron el año pasado y, normalmente, eso significa pocas sorpresas en las posiciones de los pilotos según el potencial de sus coches.

Valteri Bottas se autoeliminó con su Mercedes en la clasificación, los dos Haas se quedaron fuera por un error en el cambio de ruedas, Carlos Sainz, con un problema estomacal, y Max Verstappen, por el coche de seguridad… cinco puestos que Alonso aprovechó para pasar de décimo a quinto en Albert Park. “Tuvimos la suerte en Australia de terminar quintos por los abandonos de Haas, esperamos hacerlo también sin esos extras, terminar en esas posiciones", explicó en el 'paddock' de Shakir, menos caluroso que de costumbre. "Llegar al podio es razonable. En Australia estábamos a dos posiciones de ese podio, estábamos muy cerca. Ricciardo y Kimi estaban luchando, en una carrera todo puede pasar, estuve en el podio en 2009 con el KERS y con aquel Renault del 2009… Cualquier cosa puede pasar en la F1, creo que es posible", concluye.

Será un gran premio difícil para McLaren, pero Alonso, ganador en tres ocasiones (2005, 2006, 2010) —solo Sebastian Vettel suma tantos triunfos— se agarrará a cualquier posibilidad en un trazado que “me gusta, siempre tengo buenas sensaciones cuando llegó aquí, y además, en los últimos años se acaba por la noche y eso aún me gusta más”, añade el bicampeón del mundo que tiene como hoja de ruta aprovechar cualquier ocasión de sumar puntos mientras la gran actualización del McLaren llega para el Gran Premio de España, la quinta carrera de la temporada. "Creo que hay un hueco bastante razonable con los líderes, es cosa nuestra el poder ganar rendimiento, a ver si podemos reducir la distancia con los líderes, a ver si podemos estar a una distancia razonable, depende de nosotros. Los próximos dos meses van a ser cruciales en nuestras aspiraciones por el Mundial, para mejorar el coche”, concluye.