El bailarín y coreógrafo cordobés Antonio Ruz, Premio Nacional de danza 2018, presenta hoy, en la Caja Negra del Centro de Creación Contemporánea de Andalucía (C3A), el espectáculo Presente, una obra que indaga en el concepto del tiempo, del instante, desde diferentes vertientes: filosófica, sensorial y psicológica. Según reconoce el artista, el montaje no solo habla del tiempo, sino del presente «que estamos viviendo, de la velocidad y del momento frenético al que nos tenemos que subir para poder sobrevivir», invitando a observar el tiempo, escucharlo y sentirlo.

El montaje propone un viaje a través del movimiento y de la danza, pero no solo coreográfico, continúa Ruz, sino por el uso de los objetos. «Para mí era muy importante, un reto, cómo los propios intérpretes construyen el espacio escénico en directo», por eso era muy «interesante» ese enfoque de «casi instalación museística o de performance», que convierte a la Caja Negra del C3A en un espacio «idoneo» para llevarlo a cabo, destaca el artista cordobés, que confiesa que le llena de «llusión» presentar un espectáculo de la compañía en este lugar. Estrenado en los Teatros del Canal el pasado año, el montaje se está presentado en salas de teatro, «pero esta era la ocasión para que dialogase con la arquitectura de un museo y en un contexto ideal para la obra», relata Ruz.

Cinco intérpretes, incluyendo al bailarín cordobés, «que tienen mucho recorrido» darán vida a este espectáculo, que cuenta con elementos musicales que van lanzándose de una forma aleatoria, ya que es una obra en la que sonido y música, cerada especialmente para esta obra, tiene mucho peso.

«En el montaje, hay unos objetos que nos sirven también para crear una arquitectura del propio espacio», continúa el bailarín, que añade que también se usan de forma simbólica para que el espectador pueda hacer su propia lectura. «Es una propuesta muy abierta y deja al público libre e incluso lo hace trabajar para llegar a sus propias conclusiones, porque, más que respuestas, lo que plantea Presente son muchas preguntas, y dentro de ellas están los símbolos, los colores de los objetos o una puerta roja «que puede simbolizar el hilo de la vida, de la sangre», explica Ruz, que también avanza que en la escenografía se cuenta con unas sillas que los bailarines usan de una forma muy original y 80 listones de aluminio, «una significación muy poética, y lo bonito es que la obra tiene un estado mutante de principio a fin, aunque no acaba, porque el tiempo continúa». En cuanto a la música, está compuesta de forma electroacústica por el compositor italiano Bruno Dozza, muy vinculado a Córdoba, ya que fue profesor de Composición en el Conservatorio Superior de Música. Ruz también resalta el vestuario, creado a medida del concepto estético de la obra.

CÓRDOBA

CAJA NEGRA DEL C3A

VIERNES 18

20.30 HORAS