El concierto extraordinario de Navidad de la Orquesta de Córdoba trae este año un programa familiar sobre la obra La bella durmiente: las dos piezas previstas comparten dicho título, aunque no la forma, y se presentarán en forma de suite.

Engelbert Humperdinck (1854-1921) estudió música en el Conservatorio de Colonia y la Escuela de Música de Múnich, fue colaborador y asistente de Richard Wagner -a quien conoció en Italia- en el estreno de Parsifal en Bayreuth, y uniendo el influjo del maestro sajón, su personalidad amante de lo popular y la moda de las óperas de cuentos de hadas en el cambio de siglos, alcanzó el éxito (clamoroso) con su ópera Hansel y Gretel en 1893. Considerado más un discípulo de Wagner que un verdadero innovador, el éxito fue duradero, aunque único en su carrera. La bella durmiente pertenece al subgénero de hadas y fue estrenada en diciembre de 1902 en el Stadttheater de Frankfurt am Main, bajo la dirección del compositor.

Más conocida, al menos en su forma de suite, es la música para el cuento de hadas-ballet La bella durmiente de Piotr Ilych Tchaikovsky (1840-1893), estrenada en 1890 en el Teatro Mariinsky de San Petersburgo. Ivan Vsevolozhsky, director de los Teatros Imperiales de San Petersburgo, habló ya en 1988 con el compositor sobre una posible adaptación de ballet basada en la historia de Undine.

Posteriormente, se decidió que La belle au bois dormant de Charles Perrault sería la historia para la cual compondría la música del ballet. Tchaikovski no dudó en aceptar el encargo, a pesar del poco entusiasmo suscitado por su anterior ballet, El lago de los cisnes. El escenario en el que trabajó Tchaikovski se basó en la versión de los Hermanos Grimm de la obra de Perrault, aunque Vsevolozhsky incluyó en el ballet otros personajes de los cuentos de Perrault, como El gato con botas, Caperucita Roja, Cenicienta, El pájaro azul, Riquet el del copete y Pulgarcito.La obra tuvo mejor acogida que El lago…, aunque Tchaikovsky no pudo contemplar el éxito de la obra en los teatros europeos -al igual que ocurrió con su sexta sinfonía- al suicidarse en 1893, impulsado por un inconfesable asunto privado.

CÓRDOBA

TEATRO GÓNGORA

JUEVES 20 Y VIERNES 21

20.30 HORAS