De regreso a la pista, a menos de un kilómetro y a la derecha en dirección a Carcabuey se encuentra la alberca-manantial de Bernabé, situada junto a una antigua casilla de aperos de labranza -restaurada recientemente- de la Huerta Comino, que antaño se regaba con sus aguas. Su caudal procede de la infiltración del agua de lluvia en las calizas y dolomías de Sierra Alcaide, en la zona del Peñón del Nervo. Es una fuente conocida por la baja temperatura con la que manan sus aguas en cualquier época del año. Consta de un muro de contención del terreno a cuyos pies hay un estanque cuadrado de 8x8 metros enlucido con losas de piedra. El agua sale al exterior por un conducto situado en su esquina sureste y rebosa por la esquina opuesta, desde donde continúa entubada hasta el arroyo de Bernabé, situado a escasos 50 metros. Junto a la alberca se han acondicionado unos asientos y se ha enlosado el suelo.

A medio camino entre el cruce con la carretera A-339 y la cortijada de Bernabé encontramos junto a la pista una tubería metálica con forma de cayado, de casi tres metros de altura, que vierte gran cantidad de agua a una pileta de planta circular. Es un sistema de aliviadero de la conducción de aguas hacia Carcabuey, por donde se drenan los excedentes. Al lado de la misma se ha colocado un panel informativo sobre el cultivo del olivo.

Conforme nos acercamos a Carcabuey, el valle se va haciendo mucho más amplio mientras aumentan las huertas y pequeñas casas vinculadas al medio. Solamente la vegetación ribereña de fresnos y álamos negros que acompañan al arroyo rompen la monotonía del olivar.