CÓRDOBA . TEATRO GÓNGORA/ VIERNES 27 / 20.30 HORAS

La compañía La Zaranda (Teatro inestable de ninguna parte) vuelve a Córdoba, concretamente al Teatro Góngora y dentro del ciclo dedicado al teatro andaluz, hoy, a las 20.30 horas, con la pieza de Eusebio Calonge Ahora todo es noche, (Liquidación de existencias). Dirigida por Paco de la Zaranda, el espectáculo está interpretado por Gaspar Campuzano, Enrique Bustos y Francisco Sánchez.

La Zaranda Teatro reúne todo el universo creado a lo largo de sus 40 años de trabajo. Sus heridas y cicatrices, su desamparada imaginería, su desgarrada voz y sus personajes desahuciados. Moviéndose entre el esperpento, la tragedia, un humor perturbador y un compromiso poético insobornable.

Enraizados en los clásicos y en continuo crecimiento hacia nuevas formas de hablarle al alma, tradicionales a la par que rupturistas, siempre a contracorriente, exponen la pasión de cuatro décadas por los escenarios del mundo. A través de unos personajes mendigantes hace esta metáfora de una liquidación de existencias consciente de que la noche se acerca. Esta Ahora todo es noche es también una declaración de la lectura alegórica de este montaje.

Tres mendigos buscan un lugar donde dormir, un cobijo para los temporales de la vida. Y advierten que si es malo no saber adónde ir, peor es no saber dónde se está. La historia de esos vagabundos es en realidad la autobiografía de esta compañía después de cuarenta años de trayectoria sobre las tablas. La Zaranda es un sueño, un sueño dentro del teatro, un sueño que resiste a pesar de esta época llena de basura y de vulgaridad.

A este montaje no le falta el sarcasmo y la crítica feroz contra el poder: los mendigos transitan por las cloacas y la más hedionda es precisamente la que llega de «las consejerías» y la de «los grandes teatros», según declaran. Y no olvidan atacar al mundo de la cultura, al mundo del teatro, cuando los vagabundos se prueban corbatas que en la lectura alegórica son las etiquetas de la falsa vanguardia. Palabras, palabras, palabras… y vacío. J.A.D.