«Un, dos, tres», «uno, dos, tres», «golpe entero, planta sola», «suavidad, vamos a intentarlo con la cadera, las piernecitas»... Así se oía la voz de Merche Esmeralda en el escenario del Teatro Coliseo de Palma. Con firme suavidad indicaba a alumnas de Palmacompás lo esencial para bailar flamenco. Primero los pies, después los brazos, «hay 8 posiciones de brazos, hoy vamos a estudiar 6», afirmaba, añadiendo que «en la próxima visita, las otras dos».

La bailaora Merche Esmeralda está recibiendo el homenaje de la 39 Semana Cultural Flamenca de la peña La Soleá y el Patronato Municipal de Cultura del Ayuntamiento de Palma del Río, un gesto de cariño que ha agradecido y al que ha respondido participando como público en la Semana Flamenca e impartiendo, ayer, una clase magistral. Desde Palmacompás, Elena Ruiz confiesa que es una invitación que no se cuestiona, al igual que responde Sergio Moreno, de Alma Flamenca. Ruiz dice que han explicado a sus alumnas que «es una artista de gran trayectoria, por lo que esta clase es todo un privilegio». La gran bailaora sevillana no oculta que ha quedado «prendada» de Palma del Río, de la que dice que «es un monumento completo, me gusta su historia, la gente es amable», y resalta el olor a azahar de la ciudad en este tiempo.

Reconoce la labor de La Soleá, «una peña tan pequeñita». Esta noche recibirá su cordobán e insignia envuelta en palabras de Manuel Martín Martín, y recordando que otro socio de la peña, Francisco Moyano, la llama «emperatriz del baile jondo».