Los aficionados al mundo del toro, no solo de La Colonia, sino también de otras localidades vecinas, llenaron las calles de Fuente Palmera para participar en un evento novedoso que se presentaba en la víspera de la Feria Real.

La multitud que empezó a concentrarse poco después de las nueve de la mañana en la Plaza Real rompió los pronósticos del Círculo Taurino de Fuente Palmera, organizador del primer Encierro Infantil. De hecho, los 400 pañuelos rojos destinados a los niños vinieron cortos.

La jornada prosiguió con un pasacalles amenizado por la charanga La banda del toro, siguiendo el recorrido hasta la plaza de Los Remedios, donde se hicieron tres rezos a una pequeña imagen de la patrona y se entregaron a los más pequeños periódicos enrollados, emulando la típica tradición de los mozos de los sanfermines. A continuación, y haciéndose de rogar, el clásico chupinazo abría los portones de una cochera de la que salieron embistiendo seis carretones de diversos tamaños, los mismos que utilizan novilleros y matadores en sus entrenamientos.

Los cientos de jóvenes y sus familias, emprendieron la carrera delante de los astados con el mismo itinerario hasta desembocar de nuevo en la Plaza Real. Muchos niños y niñas dieron sus primeros capotazos y recortes a los toros de juguete. Lo mismo hicieron tres jóvenes alumnos de la Escuela Taurina de Córdoba que participaron voluntariamente en la jornada. La organización también ofreció un desayuno molinero a todos los asistentes.