La barriada de El Higuerón celebró anoche la tradicional cena de los mayores, una de las actividades más emotivas del año, que sirve para dar el pistoletazo de salida a una nueva edición ferial. Con un gran número de colaboradores, los vecinos con más edad de este barrio periférico disfrutaron de una velada donde la convivencia y la buena armonía fueron en todo momento las notas dominantes.
Fueron más de doscientas personas las que disfrutaron de este primer día de feria, en la que estuvieron presentes varias autoridades municipales, así como representantes de los grupos políticos municipales, que acompañaron a la delegada de esta barriada, Maite Polo, quien se presentó públicamente y prometió ser portavoz de las peticiones ciudadanas. Luego, recorrieron las mesas para felicitar a los mayores allí congregados, en una noche plácida, que contó con la actuación de Antonio y su grupo de baile de Johanna Castilla. La plaza de Rafael Villar, situada junto al centro cívico que lleva su hombre, se convirtió en un salón para la fiesta, la diversión y la tertulia, en la que los vecinos compartieron experiencias, dialogaron sobre las cuestiones que más les preocupan y pasaron una tarde llena de buen humor y entretenimiento, con una cena en la que no faltó de nada.
Las fiestas continuarán hasta el domingo y en ellas no faltarán las actuaciones musicales en la caseta municipal, así como talleres escuela de circo, rutas y un perol de convivencia, con el que se pondrá el punto y final.
