La extrema derecha española se ha soliviantado ante el anuncio de referéndum de independencia de Cataluña. El anuncio de la fecha y pregunta por parte del president de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha provocado airadas reacciones entre los sectores más conservadores de la derecha.

La respuesta de la Falange, no se ha hecho esperar ya que su jefe nacional, Norberto Pico, acusaba a Mariano Rajoy y su gabinete de ser corresponsable del "golpe secesionista":

Mucho más belicosos, los cachorros de esta asociación publicaban una foto de falangistas armados y se declaraban "legitimados de nuevo para defender a España hasta el final".

Aunque Democracia Nacional y España 2000 no se ha manifestado todavía, sí lo ha hecho Vox. En concreto, su presidente, Santiago Abascal, solicitaba prisión para Puigdemont y tachaba el anuncio de "golpe de Estado", antes de reclamar prisión preventiva ante "sus hechos sediciosos".