La líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, anunció ayer en Jerez de la Frontera que presentará una denuncia a la Fiscalía para que investigue un posible delito de odio en la agresión que el sábado sufrió una mujer que retiraba lazos amarillos en Barcelona. La jefa de la oposición catalana defendió que sea la Fiscalía la que investigue esta agresión «brutal» y advirtió: «Lo que no vamos a hacer es quitar hierro a las agresiones que se sufren las personas en el mismo momento en que están retirando lazos amarillos».

«Ante esta situación no se puede mirar para otro lado», defendió Arrimadas, que declaró que desde su partido darán apoyo a todas las personas que están siendo «señaladas, identificadas e insultadas de manera absolutamente injusta por simplemente defender de manera pública que quieren un espacio público de todos los catalanes». Este caso demuestra, según la líder naranja que la «grave fractura social» de la que su partido hablaba «ya es una realidad».

En repulsa al ataque sufrido por la mujer, esposa de un militante de Ciudadanos, el partido ha convocado una concentración el miércoles en el lugar de la agresión. «Es inimaginable en democracia lo que está haciendo el separatismo», dijo Arrimadas, lanzando un mensaje al presidente del Gobierno: «Deje de mirar para otro lado porque estos son sus socios de Gobierno».

OFICINA DEL PP / Tras los últimos acontecimientos, el PP también anunció medidas: los populares abrirán una oficina de asesoramiento y apoyo para personas denunciadas, sancionadas o agredidas por retirar lazos amarillos de la vía pública, según el presidente del grupo municipal popular en el consistorio barcelonés, Alberto Fernández Díaz.

El edil popular cuestionó «el silencio» de la Concejalía de Derechos Civiles del Ayuntamiento de Barcelona sobre la agresión, señalando que esta concejalía «es rápida siempre para defender a antisistemas y okupas, y sin embargo ahora guarda silencios».

«Condenamos la agresión sufrida por esta mujer. Barcelona rechaza cualquier forma de violencia, intolerancia y xenofobia», señaló Ada Colau en Twitter, antes de hacer un llamamiento a la prudencia al resto de formaciones políticas antes de que se aclare el suceso.

Por su parte, el hombre que agredió a la mujer aseguró a TV-3 que la discusión no fue por motivos políticos, sino porque le reprochó que estuviera ensuciando la calle tirándolos al suelo. Lo que sirvió al conseller Josep Bargalló para denunciar «falsedades e injurias» de Cs y afines.