La polémica era un runrún en los pasillos y este miércoles ha estallado en la sesión de control. La vicepresidenta del Gobierno ha aprovechado una pregunta de la portavoz de Unidos Podemos, Irene Montero, para reprocharle las formas de protesta que usan sus diputados en el hemiciclo: exhibición de camisetas, pancartas, exabruptos y enfrentamientos gestuales que elevan la tensión.

Montero ha planteado a Soraya Sáenz de Santamaría ocho preguntas sobre la filtración de las escuchas del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) al Rey emérito, basadas en su mayoría en informaciones periodísticas. Al término de su planteamiento Pablo Iglesias, sentado en el escaño de su lado, ha felicitado a su compañera con un sonoro “¡Muy bien!” que se ha colado todavía en el micrófono abierto de la portavoz.

Santamaría le ha afeado falta de rigor en su planteamiento por el cambio de actitud que Podemos ha mantenido en los últimos días sobre este tema. La ha acusado de acuñar un “pseudoparlamentarismo” en el que se da más valor interpretaciones con información sesgada que a los hechos. La vicepresidenta ha reprochado a Podemos que “pongan en cuestión todo lo que no pueden controlar, empezando por la prensa”, en relación a la denuncia de los periodistas por amenazas, y ha criticado a los morados por estar más preocupados “por los que exaltan al terrorismo que por los que lo sufren”, en referencia a la iniciativa para suprimir el delito de enaltecimiento del terrorismo.

Santamaría ha aprovechado la disputa interna en Podemos para echarle en cara a Montero que actúen con esos modales incluso con los diputados de su partido “que no defienden sus valores con la suficiente intensidad”. A la salida del hemiciclo, la vicepresidenta ha vuelto a expresar el malestar por las formas abruptas que emplean algunos diputados de Unidos Podemos.

PERPLEJIDAD POR LA TENSIÓN

El portavoz del PP, Rafael Hernando, también ha mostrado en los pasillos su "perplejidad" por los "enfrentamientos" y "aspavientos" de Podemos en el Parlamento. "Son formas de acoso dentro del hemiciclo. Esto no es razonable y espero que reflexiones. Utilizar el hemiciclo para convertirlo en un circo es banalizar la cámara y la soberanía popular", ha reflexionado en los pasillos del Congreso.

Las quejas tras que la Mesa del Congreso examinase el martes esta polémica y tras una reunión entre la presidenta de la Cámara, Ana Pastor, con la propia Montero, en la que le transmitió las quejas.

Por toda respuesta Iglesias cargó este martes contra Pastor. Cuestionó su neutralidad y la acusó de favorecer al PP para poder “suceder” a Mariano Rajoy. El lunes, el líder de Podemos defendió en la presentación de un libro, el empleo de insultos en sede parlamentaria.