Intercambio de reproches subido de tono entre PDECat y ERC, de un lado, y Soraya Sáenz de Santamaría, de otro, este martes en el Senado. Ambos partidos han aprovechado la sesión de control al Gobierno para preguntar a la responsable de la 'carpeta catalana' sobre la presunta intención del Ejecutivo de precintar los colegios electorales para impedir el referéndum. Tanto el senador de la antigua CDC Josep Lluís Cleries como el republicano Miquel Angel Estradé han reprochado a la vicepresidenta que cambie la "operación diálogo por la operación precinto" para impedir los "mandatos democráticos" de la sociedad catalana y la han advertido que la consulta se va a celebrar. En su respuesta, la mano derecha de Mariano Rajoy ha asegurado que no va a ser así porque en España, precisamente porque hay democracia, "la ley se cumple" y ha aprovechado los escándalos de corrupción que acechan a la antigua CDC y las revelaciones de Santi Vidal, para tratar de sacar a uno y otro los colores.

Así, Sáenz de Santamaría ha reprochado a PDECat que tanto cuando Artur Mas es juzgado por desobedicencia -en alusión al juicio sobre el 9-N- como cuando hay un caso de corrupción -en referencia al caso del 3%- siempre se acojen al "comodín del procés". Asimismo, ha avisado de que aunque al Govern le "moleste" la voluntad de diálogo, ella va a continuar con esa "convicción", que no es una "operación".

Por último, ha recordado que no ha sido Rajoy ni la justicia quien "echó a Mas", sino la CUP, y Junts pel Sí lo "aceptó", igual, en su opinión, que consintió el "modelo radical" del partido antisistema. En este momento, la vicepresidenta ha tenido un lapsus y parece que ha dicho "morreo" pero después en pasillo ha aclarado que quería decir "modelo".

'PAGA EL PATO EL CHIVATO'

En cuanto a ERC, ha aseverado que las revelaciones del exsenador Vidal "desmontan" sus convicciones democráticas. "Cuando gente como usted presume de saltarse la ley, el que está dando precinto a la democracia es usted", ha insistido a Estradé, para acusarle a continuación de hacer dimitir a Vidal en lugar de dar explicaciones a la sociedad catalana sobre si es verdad que la Generalitat está cometiendo ilegalidades. En su partido, ha afirmado, "quien paga el pato es el chivato".

A continuación, ha sido interpelada por Podemos sobre su política para favorecer el encaje constitucional de los distintos territorios y la número dos del Gobierno ha rehusado atender la demanda de reformar la Constitución y ha afirmado que el derecho a decidir es un "eufemismo".

Por último, en los pasillos y preguntada por la intención del Govern de crear una agencia tributaria catalana, ha pedido a las autoridades autonómicas que dejen de "intranquilizar a los ciudadanos" con un tema que tanto les preocupa, como satisfacer sus deudas con el erario público. "No creo que les tengan que someter a esa tensión, es poco respetuoso con la buena fe del contribuyente", ha concluido.