Pedro Sánchez ha avisado este domingo en Oviedo a sus adversarios políticos que tienen que dejar de pensar que su llegada a la Moncloa ha sido un "accidente" y que su Gobierno durará poco. "No volverá la derecha (...) Esta legislatura vamos a sentar las bases de la gran transformación que exige España hasta el 2030", ha afirmado.

"Nuestro objetivo es la justicia social y nuestro horizonte, el 2030", ha insistido en la Fiesta de la Rosa del PSOE asturiano en la que ha participado esta mañana. Los cinco pilares en los que desea apoyar la "transformación" de España son: la educación, el trabajo, la sanidad, el medio ambiente y las pensiones.

Para lograr alcanzar su reto necesita, no obstante, traducir en las urnas ese poder ejecutivo que logró con la moción de censura en junio y así lo ha pedido al acabar el mitin. "Para consolidar el cambio, que primero ha sido parlamentario en referencia a la expulsión de Mariano Rajoy, necesitamos que se consolide el cambio social en nuestro país", ha reclamado. El próximo mayo habrá elecciones municipales, autonómicas y europeas, además, de que es probable que antes, este otoño, se celebren de manera adelantada los comicios andaluces.

Sánchez celebra este fin de semana sus primeros 100 días en el Gobierno y ha aprovechado para asistir a su primer acto de partido desde que está en la Moncloa.

Plan contra el paro juvenil sin concretar

El jefe del Ejecutivo se ha comprometido a continuar su labor con "coherencia, diálogo, realismo y ambición" y ha recalcado que todas sus actuaciones seguirán regidas por el principio de "justicia social". En este contexto ha defendido la tarea de trabajar en favor de la igualdad entre hombres y mujeres y en contra de la pobreza infantil y ha anunciado "un plan de choque contra el paro juvenil" del que no ha concretado nada.

Ha asumido que con solo 84 diputados en el Congreso no puede derogar la reforma laboral del PP o diseñar un nuevo modelo de financiación autonómica, pero se ha comprometido a anular los artículos "más lesivos" del estatuto de los trabajadores y también mejorar las cuentas de las comunidades.

Discurso "xenófobo y populista" de PP y Cs

Antes de Sánchez, han tomado la palabra los dirigentes asturianos y también la vicesecretaria general del PSOE y portavoz en el Congreso, Adriana Lastra. La diputada asturiana ha acusado a "la derecha azul y naranja", en referencia al PP y Ciudadanos de alentar un discurso "xenófobo y populista contra el diferente" y haber intentado utilizar a las víctimas de ETA, aunque esta vez, ha concretado, las propias víctimas "les han dicho que no".