En asuntos como la unidad de España "es obligado que los dos grandes partidos vayan de la mano. Y quien rompa eso es un irresponsable", ha advertido Mariano Rajoy, expresidente del Gobierno y del PP, a tan solo dos metros y medio del actual presidente del partido, Pablo Casado.

Era la distancia que separaba el escenario del auditorio Rafael del Pino de Madrid de la primera fila de asientos, donde el líder de la oposición se ha sentado para asistir a la presentación de 'Una España mejor' )Plaza & Janés), el libro testimonio que ha escrito el presidente al que descabalgó una mociòn de censura capitaneada por el socialista Pedro Sánchez.

Rajoy ha enmarcado ese mensaje principal de su intervención en una alusión a la necesidad "básica" de consensos en materia de cuatro temas esenciales, además del mencionado: la lucha contra el terrorismo, el desarrollo del modelo territorial, el 155 o la soberanía nacional". Sobre estos temas de Estado"es un error legislar por mayoría", ha comentado, "solo con el consenso funcionan bien, como pasó con la Constitución".

ENSEÑANZA CATALANA

El expresidente se ha referido a su experiencia con el artículo 155 de la Carta Magna, que él aplicó por vez primera en la historia de España, y sacando esta enseñanza: "El mensaje que ha dejado el artículo 155 es que la nación española tiene instrumentos para defenderse. Y cuando se ataca la unidad nacional o la soberanía nacional, la nación se puede defender. Lo saben y lo conocen muy bien los que han ido conta la unidad de la nación y la soberanía nacional".

Ha sido el momento en el que el expresidente ha tirado de un tono más terminante, a lo largo de un acto en el que se ha sentido entre amigos. Rajoy ha reivindicado su figura con su ironía: "Los campeones de los tópicos decían que yo era don Tancredo", ha dicho antes de referir las medidas más importantes desarrolladas en su etapa de gobierno.

Entre ellas, "pagar cinco millones novencientas mil facturas que las administraciones debían". El hoy registrador de la propiedad ha recordado las reformas que emprendió, como pórtico para su frase más enfática: "Desde la moción de censura, hace más de un año y medio, no se ha hecho nada".

INCONDICIONALES

Pablo Casado ha acudido acompañado de sus subsecretarios Cuca Gamarra, Pablo Montesinos, Ana Beltrán y Pablo de Olano. Pero el auditorio de la Fundación Rafael del Pino se ha llenado sobre todo de marianismo. Han estado, claro, los pivotes de su política en Catalunya Enric Millo, Jorge Fernández Díaz y Alicia Sánchez Camacho. También una representación de los gobiernos de Rajoy: el que fue portavoz Íñigo Méndez de Vigo, el extitular de Interior, Juan Ignacio Zoido, el de Justicia, Rafael Catalá, la de Empleo, Fátima Báñez... y figuras como Ana Pastor, Alberto Núñez Feijoo, María Dolores de Cospedal, Alberto Nadal, José Ignacio Wert o el ahora senador Fernando Martínez Maíllo

Y, por supuesto, Cristóbal Montoro. Y también ella: "Soraya está dentro", dijo por un pinganillo un organizador cuando llegó la exvicepresidenta Sáenz de Santamaría.

Presentada este miércoles por el periodista de la Cope Carlos Herrera, buena parte de la obra gira en torno a dos acontecimientos cruciales de us mandato: el capeo del rescate bancario y la crisis política en Catalunya, ambos lo suficientemente graves como para llevarle a corroborar sin ambages lo que le dice un colaborador cercano: "En siete años nos tocó defender en dos ocasiones la soberanía nacional"

Los otros acontecimientos -"o hechos que acontecieron durante mi gobierno" en palabras de Rajoy- precisan también su propia atención en páginas, en un caso, "la disolución de la banda terrorista ETA", y en el otro, cobrándose alguna factura: "Una moción de censura que no ha servido para mejorar la estabilidad del país".

Ha dicho Rajoy que en el libro habla de muchas cosas. "También de corrupción, y de presunción de inocencia, y de los inquisidores, que florecen por doquier y no descansan nunca".

Y contiene la obra un apunte biográfico no demasiado conocido fuera de la Galicia autonómica, unas páginas en las q que reivindica un antecesor represaliado por el franquismo. El abuelo del expresidente, Enrique Rajoy Leloup, "concejal en Santiago y artífice principal, junto con Alexandre Bóveda, de la redacción del primer Estatuto de Autonomía de Galicia allá por el año 1936". Aquello no acabó bien: "Bóveda fue fusilado al inicio de la Guerra Civil (...) y mi abuelo fue expulsado de la universidad y suspendido en el ejercico de la abogacía".

Y, en fin, algunos párrafos que, como ya hizo en un viejo congreso celebrado en Valencia, abordan su propuesta de posicionamiento del partido con un aire zen. "El centrismo no es una ideología; no es una doctrina política. El centrismo es una voluntad".