El 'expresident' y cabeza de lista de Junts per Catalunya, Carles Puigdemont, ha rechazado este viernes la posibilidad de nombrar a un candidato alternativo por si él no puede ser investido tras las elecciones del próximo 21 de diciembre en caso de que su propuesta sea la más votada.

La idea la ha lanzado el número cinco de la lista de ERC, Carles Mundó, en una entrevista en 'Nació Digital'. Mundó, que ha pasado más de un mes en la cárcel de Estremera en prisión preventiva, ha recalcado que si Puigdemont intentase volver, el Estado español "seguro" que mandaría encarcelarle y "no podría ejercer sus funciones como electo".

A juicio del 'exconseller' de Justícia, a partir del 22 de diciembre tiene que haber un Govern en Catalunya que se ocupe de la gestión del día a día, al margen del "valor simbólico" de los miembros del Ejecutivo cesados que están en Bruselas, que "ayudarán a continuar denunciando los abusos que se han sufrido y la injusticia que ha representado la destitución del Govern".

El 'expresident', en cambio, ha considerado que "impedir la investidura del Govern actual" equivaldría a asumir que la aplicación del artículo 155 "continúa en vigor". En rueda de prensa a través de videoconferencia, Puigdemont ha subrayado que encabeza un Ejecutivo "ilícitamente destituido" y, por esto, cree que tanto Junts per Catalunya como Esquerra deben trabajar para que el 155 quede "derrotado en las urnas y la Generalitat se pueda retomar donde se dejó".

"Persistir"

El candidato de JxCat también ha llamado a los independentistas a "persistir" el 21-D porque, de este modo, ha considerdo, será "imposible" que en la UE "no entiendan que la realidad va por encima de los prejuicios".

Asimismo, ha señalado que el deber de la Comisión Europea es garantizar que los estados protejan "la carta de derechos humanos y las directivas europeas" y ha pedido al Ejecutivo comunitario que no solo escuche a los estados miembros, sino también a los ciudadanos, pues "los que se manifestaron ayer son ciudadanos europeos".