"Voy a ser claro. El pueblo de Cataluña va a votar en un referéndum sobre la indepenencia de Cataluña, entre finales de verano (21 de septiembre) y principios de otoño. Así de tajante se ha mostrado el 'president' Carles Puigdemont en su comparecencia solemne de este lunes en la Galería Gòtica del Palau de la Generalitat, y flanqueado por Oriol Junqueras y Raül Romeva, para señalar que la sentencia contra Artur Mas, Joana Ortega e Irene Rigau,no modifica un ápice la hoja de ruta de su Gobierno, que pasa por celebrar un referéndum de autodeterminación. "Lo que hoy ha condenado la justicia española, lo indultará el pueblo de Cataluña en las urnas. Votando este mismo año.

"De la misma manera que el día del juicio dije que se juzgaba a todos los catalanes que participaron en el 9-N, hoy digo que los 2,4 millones de catalanes que fueron a votar han sido condenados" ha señalado Puigdemont. El 'president' ha afirmado que la sentencia no acaba con el diálogo, porque no ha existido, sino que demuestra que no hay siquiera "la voluntad de una salida política". Con todo, Puigdemont ha vuelto a hacer una llamada al diálogo, eso sí, sin límites: "Estamos de acuerdo con la Fundación Konrad Adenauer, no caben solo medidas judiciales, sino también dialogadas. O hablamos o hablamos. O negociamos o negociamos" ha sentenciado el jefe del Ejecutivo catalán.

COMPROMISO DEL VICEPRESIDENTE

Junqueras, que ha participado a preguntas de los medios, ha rematado lo expuesto antes por el 'president' y ha aseverado que la sentencia "refuerza el compromiso democrático obtenido en las elecciones, a las que concurrimos con este programa".

Al hilo de las voces internacionales que empiezan a poner los ojos en lo que sucede en Cataluña (ello es observable en la acreditación de medios extranjeros, por ejemplo, en este mismo acto de Puigdemont), Puigdemont ha reiterado su interpretación del dictamen de la Comisión de Venecia, es decir, un varapalo para la salud democrática española. Así mismo, ha desvelado que son "muchos" los que se acercan a la Generalitat para conocer la versión catalana "de la información que legítimamente" les facilita "el Gobierno español". "Hay inquietud en Europa", ha sentenciado el 'president'.