El Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha publicado este viernes su barómetro de diciembre, el primero tras la irrupción de Vox con 12 diputados en las elecciones en Andalucía. Según los datos de este organismo, el PSOE sigue en el primer puesto con una intención de voto del 28,9%, aunque pierde más de dos puntos respecto al sondeo anterior (31,2%). La segunda plaza se la lleva el PP (19,1%) y la tercera, Ciudadanos, con 17,9%. Podemos y sus confluencias de En Marea, En Comú Podem y Compromís suman 14,9% frente al 18% de hace un mes. Los ultras de Vox suben un punto, de 2,5% a 3,7%, de manera que tienen opciones para entrar en el Congreso de los Diputados.
Los partidos de la izquierda supondrían la mayoría, con el 43,8% frente al 40,7% de las derechas, aunque PSOE y Podemos se han dejado cinco puntos entre los dos y el de PP-Cs-Vox ha subido uno respecto al anterior estudio.
Justo después de las andaluzas
La encuesta se realizó a 2.984 personas en los 12 primeros días de diciembre, es decir cuando todos los medios de comunicación analizaban la entrada de Vox en el Parlamento de Andalucía con 12 escaños. El sondeo recoge el aumento de los apoyos que los ultras están ganando tras ese triunfo en las urnas y han conseguido escalar hasta el 3,7% en la intención de voto.
El CIS también ha incluido una pregunta sobre las elecciones europeas, que se celebrarán el próximo 26 de mayo junto a las municipales y algunas autonómicas. El PSOE sería el partido más votado con el 19,7% de los votos y superaría al PP, con el 14,3%. Cs lograría el 10,6%, Podemos y sus confluencias, el 9,6%. Vox conseguiría el 2,1%.
Valoración de líderes
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sigue siendo el político más valorado aunque se mantiene en la nota y suspende: un 3,9. Albert Rivera (Cs) saca un 3,7 y Pablo Casado (PP), un 3,4.
Alberto Garzón (IU) es el que peor evolución ha tenido y ha caído de 3,6 a 3,3. Pablo Iglesias, en quinta posición, también pierde una décima, hasta el 2,9.
"Satisfacción" socialista
El PSOE ha mostrado rápidamente su "satisfacción" por los resultados del sondeo. "Los ciudadanos valoran muy positivamente nuestro trabajo. Somos el primer partido de España, a gran distancia del segundo y el tercero. Y Pedro Sánchez es el líder mejor valorado. Vamos a elevarnos sobre el ruido de la derecha y a mejorar la vida de la gente", ha señalado el secretario general del grupo parlamentario socialista, Rafael Simancas.
Desde que José Félix Tezanos llegó a la presidencia del CIS, tras la moción de censura de Sánchez a Mariano Rajoy, las encuestas del organismo público han estado rodeadas de polémica. Primero, por sus vínculos con el PSOE. Tezanos fue hasta julio secretario de Estudios y Programas de los socialistas, un puesto que se resistió a abandonar. Y después, por el método empleado. Los nuevos barómetros con preguntas preelectorales, que ahora tienen una periodicidad mensual en lugar de trimestral, eliminan la tradicional cocina y suelen trasladar los resultados mediante una sencilla regla de tres con los datos de intención directa de voto (la respuesta espontánea de los consultados) más simpatía (las siglas que consideran más cercanas aquellos que no contestan a quién apoyarían), sin modificar apenas lo que responden los encuestados. En esta última ocasión, sin embargo, el organismo público ha vuelto a cambiar y se ha limitado a plasmar la intención directa.
En cualquiera de los dos casos, el PSOE, según experiencias anteriores,aparecería sobrerepresentado respecto a los resultados en unas elecciones generales, ya que la derecha suele tener mucho más voto oculto. Pero Simancas ha rechazado esta versión, en la que coinciden casi todos los expertos demoscópicos. "Estas encuestas son las más legítimas y las más creíbles que se hacen, más de 3.000 entrevistas mensuales. Aquí no hay cocina, no hay trampa. Son las respuestas directas de los ciudadanos a los encuestadores", ha dicho el diputado socialista.
