Todo parece indicar que el PP no va a proponer regular la gestación subrogada en su congreso del próximo fin de semana, pese a que importantes barones del partido han apoyado que se dé una salida a los padres que se ven obligados a recurrir al llamado 'vientre de alquiler'. El portavoz conservador, Pablo Casado, ha señalado este lunes que el cónclave popular no es "el mejor foro" para debatir determinados asuntos "de mucho calado", y por ello ha apostado porque la dirección del partido busque un "posicionamiento común" con una redacción que admita que "estas realidades suscitan debate" y deje su concreción para el parlamento nacional o autonómico o los comités de bióetica.

De ser así, la pretensión del presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, quien apoya una de las enmiendas a favor de la maternidad subrogada, y de otros como la madrileña Cristina Cifuentes caería en saco roto. Es un tema que divide al PP, puesto que el sector más conservador, que se opone también al aborto, es contrario a la regulación, de ahí que la dirección conservadora pretenda alcanzar una posición unitaria en el congreso, aunque esto suponga no definirse en exceso sobre el tema.

SÍ AL VOTO EN CONCIENCIA

Ante las tensiones que generan estos y otros asuntos sociales en su seno, el PP ha decidido además aceptar la enmienda que reclama que sus parlamentarios puedan votar en conciencia determinadas cuestiones morales y éticas. Casado ha asegurado este lunes que esta posibilidad no podrá en cuestión "principios y valores" del PP puesto que no se permitirá disentir y romper la disciplina de voto en aquellos asuntos que estén recogidos en el programa electoral.

Los populares se abren al voto en conciencia porque quieren ser "la casa común del centro derecha", según ha reflexionado Casado, y saben que en esta definición caben personas de diferentes planteamientos ideológicos, lo que en más de una ocasión les ha traido disensiones internas no siempre fáciles de resolver.

CONTINUA LA DISCUSIÓN POR LA LIMITACIÓN DE MANDATOS

Otro de los asuntos polémicos que aún no se ha solventado, cara al congreso, son las enmiendas que exigen limitar el número de cargos y que podría afectar a Dolores de Cospedal, que pretende seguir como secretaria general y compatibilizar este puesto con el de ministra de Defensa. Según fuentes populares, el vicesecretario de organización, Fernando Martínez-Maillo, aún está buscando una transacción satisfactoria para ambas partes con la dirección del partido en la Comunidad Valenciana, uno de los ponentes que apuestan por restringir los cargos.

En cuanto a la maternidad subrogada, ante el debate que se ha ido abriendo paso, Ciudadanos ha decidido subirse al carro y organizará este martes una conferencia con expertos, políticos y padres para dejar claro que ellos sí apoyan que se regule por ley este tipo de prácticas.