En la anterior comparecencia me calificaron de incompetente, insolvente, nefasto gestor, chulo... Esta vez solo me han pedido la dimisión. Hemos avanzado algo», soltó el secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, cuando llevaba tres horas compareciendo ante la Comisión de Interior en el Congreso. El orden del día señalaba que se hablaría del crimen organizado y del Tarajal, pero fue inevitable que todos los grupos abordaran el tema de la semana: la sospecha de la fiscalía de que el supuesto chivatazo a Ignacio y Pablo González de que estaban siendo investigados en el caso Lezo partió del Ministerio del Interior.

Según se supo el martes por un escrito de la fiscalía, en este contexto se considera «grave» la reunión del 8 de marzo entre el secretario de Estado y Pablo González, hermano del expresidente de la Comunidad de Madrid. Por todo ello, el Partido Socialista (PSOE), Unidos Podemos y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) volvieron a pedir a Nieto que deje su puesto.

El alto cargo de Interior no quiso abundar en la polémica por la alusión del texto de la fiscalía y tampoco quiso referirse a la posible «guerra de fiscales», un elemento que introdujo en la comparecencia el portavoz del Partido Popular. «Si hay problemas, espero que se resuelvan y si no los hay, mejor [...]. En la mayoría de los casos [los »jueces y fiscales«] aciertan, aunque a veces se equivocan y puede que en algún caso esa equivocación tenga algo que ver conmigo», dijo Nieto. «A ver si la santina me ayuda y se corrige», apuntó.

Nieto aseguró que no va a dimitir porque sabe que no se le puede achacar «ningún hecho» que pueda ser constitutivo de delito. En una entrevista concendida a la emisora Onda Cero horas antes había llegado a bromear con el hecho de que la reunión pudiera estar «grabada» para acabar con esta «pesadilla».

El diputado del PSOE Antonio Trevín afeó a Nieto que mandara un escrito a los fiscales del caso Lezo para pedirles explicaciones. El propio fiscal jefe Anticorrupción, Manuel Moix, salió al paso de la polémica suscitada por el escrito fiscal que se opone a la excarcelación de González y manifestó que «el señor Nieto no tiene nada que ver con el tema», pese a que el documento hacía mención expresa a la «comunicación chivada del secretario de Estado de Seguridad» por la reunión que había mantenido con Pablo González. El documento había sido supervisado por el propio fiscal jefe, que ya cuando se postuló para el cargo había dejado dicho que controlaría cualquier actuación realizada en Anticorrupción.

RAJOY LA PÚNICA / Por otro lado, el juez de la Audiencia Nacional José de la Mata abrió ayer una pieza separada de la instrucción de la causa sobre la presunta caja B del PP para investigar si dinero obtenido por la trama Púnica para los populares madrileños acabó financiando campañas del PP nacional. En concreto, las de las generales del 2004, 2008 y 2011, las tres encabezadas por Rajoy. De la Mata la ha abierto después de que su colega Eloy Velasco le remitiese documentación hallada en casa del exgerente del PP de Madrid Beltrán Gutiérrez.