Joan Manuel Serrat me llama desde Argentina. Quiere hablar, necesita hablar antes de que el jueves 28 haya gente que se congregue en la plaza Sant Jaume y cante Mediterráneo. Esta será la única entrevista personal que, al margen de la rueda de prensa, dio desde Latinoamérica. Su icónico himno será utilizado «para reivindicar ante el molt honorable president de la Generalitat que no estamos siendo reconocidos», reza la convocatoria que está corriendo por las redes sociales.

-¿Qué tiene que decir al respecto?

-Pues que yo no tengo nada que ver. Ni en esta convocatoria ni en ninguna que gire alrededor de mí o de la canción Mediterráneo. No sé quién la ha convocado. Yo mismo la he recibido por wasap, como recibo mensajes de otros amigos míos que tienen mi teléfono y me reenvían cosas. No sé quién está detrás, lo que me resulta muy preocupante. Como también lo es que des tu opinión y corras el riesgo de ser manipulado. Tus ideas no tienen por qué coincidir con el pensamiento de los manipuladores.

-¿Se arrepiente de sus declaraciones? (ponía en duda la transparencia de un referéndum que no puede representar a nadie)

-No me arrepiento nunca de decir públicamente mi pensamiento. Estoy en mi pleno derecho como individuo. Y si mis declaraciones manifiestan mi posición respecto a lo que me ocurre a mí y a mis circunstancias. ¿Por qué me tengo que arrepentir?

-Sí que podía sospechar la repercusión inmediata y mediática que tendrían…

-Cuando uno opina al respecto de algo tan sensible y delicado, sabe que hay gente que estará de acuerdo y otros en desacuerdo. Y no creo que estar en contra, que opinar distinto, implique el estar en la picota. Es como si existiera una idea oficial y lo que haya podido hacer, al estar en desacuerdo con la oficialidad, implique el riesgo de ser censurado o maltratado. ¿Esto es así?

-’<b>Mediterráneo’</b> se ha enarbolado por varias causas. Recientemente, para concienciar y ayudar en el drama de los refugiados y ahora, para supuestamente contrarrestar el independentismo. ¿Cómo se siente viendo el uso que se hace de su canción?

-La canción se ha enarbolado ella a sí misma, más allá que cualquier cosa. Que sirviera para denunciar la terrible situación de los refugiados me hizo sentir orgulloso. Pero que algunos pueden haberla usado para reivindicarme a mí personalmente buscando solidaridad cuando otros censuran mi punto de vista es arrimar el ascua a su sardina. Y no entiendo que el que tenga otro, sea mi enemigo.

-¿Qué cree que pasará el 1-O?

-Se escenificará la ceremonia del voto. Otro tema es lo que ocurrirá después: si se proclamará la república catalana, por dónde irán las cosas. En estos momentos nadie lo sabe. Sabemos lo que ha ocurrido hasta ahora: ha habido una ley del referéndum aprobada en un día sin debate parlamentario. Y sabemos que el Gobierno de España ha ninguneado las voces de Cataluña durante cinco años, sin hacer el mínimo gesto. Sabemos que el Gobierno de Rajoy ha sido una fábrica de independentistas y, si bien no es el único responsable de lo que ocurre, su cuota de responsabilidad es muy alta. Volviendo a lo que va a ocurrir, me gustaría mucho que el diálogo que se ha pregonado tanto se ponga de una vez en práctica.

SEnDAlgunos le consideraron muy valiente cuando con Franco se negó a ir a Eurovisión. Y lo mismo, por haber expresado ahora su punto de vista.

-Prefiero pasar miedo que vergüenza.