El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha defendido este lunes la utilización de "expresiones gruesas" en el Congreso de los Diputados en un alegato contra la polémica suscitada la semana pasada después de su intervención en la sesión de control, cuando se mofó de Mariano Rajoy empleando términos como "se la pela", "se la sopla" o "se la bufa". El jefe podemista ha puesto en valor la "gramática parda" del Parlamento y ha asegurado que, puestos a insultar, el catellano tiene "ventajas" de las que carece el catalán. "Para ofender es una lengua más útil", ha aseverado.

Según ha señalado, la abundancia de improperios en castellano forma parte de una "riqueza lingüística fundamental" que explica, según sostiene, que los manifestantes independentistas y los mossos d'esquadra destierren el catalán cuando tienen que insultarse y elijan, en cambio, el castellano. El dirigente ha recordado que Antonio Cánovas del Castillo, parlamentario del siglo XIX, también utilizaba expresiones que hoy se considerarían racistas en el Congreso y ha puesto como ejemplo que en el hemiciclo tildó a la raza negra de "salvajes".

Iglesias ha expresado sus reflexiones en el Centre Cultural Blanquerna de Madrid, ante el delegado de laGeneralitat, Ferran Mascarell, durante la presentación de la novela gráfica "Garbo, el espía catalán que engañó a Hitler", del dibujante y guionista Lluís Juste de Nin, que narra la historia de un héroe catalán durante la II Guerra Mundial.

Al finalizar el acto, Mascarell ha agradecido a Iglesias su presencia y, aunque ha aclarado que no asume las tesis podemistas, el líder morado "dice cosas que tienen sentido y representa mucho las esperanzas de renovación de muchos catalanes". En tono amical, ha reivindicado a Albert Camus quien decía militar en el partido "de los que no siempre tienen la razón", donde él mismo se ha encuadrado. "A Pablo le permitimos que crea que tiene toda la razón porque por edad le corresponde", ha concluido.