El presidente de la Generalitat aún no ha decidido si estará junto al Rey Felipe VI en la inauguración de los Juegos Mediterráneos de Tarragona, que tendrá lugar el próximo viernes. De hecho, el Govern ha pedido esta mañana "gestos" al Monarca para evitar un plante.

La Generalitat sigue valorando si le conviene más exhibir el malestar del independentismo con el discurso del Rey del pasado 3 de octubre o dar un paso en la línea de la distensión que le reclaman varios actores políticos y económicos.

Formalmente, el posicionamiento contra la Monarquía sigue siendo firme. La portavoz del Govern, Elsa Artadi, ha cargado esta mañana contra Felipe VI por "tomar parte en la violencia ejercida contra los ciudadanos" durante el referéndum del 1 de octubre. "Validó esa violencia. Fue una gran irresponsabilidad, y eso condiciona las relaciones entre el Govern y el Rey", ha asegurado.

Para el Ejecutivo catalán, la relación entre la Generalitat y la Corona "no puede ser la misma" que antes de ese discurso. "No puede haber un encuentro protocolario con sonrisa y apretón de manos", ha dicho la portavoz para dejar en el aire la presencia de Torra en la inauguración de los Juegos Mediterráneos de Tarragona, donde, además del Rey, estará el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

El debate sobre ese encuentro "no está cerrado", y Artadi ha puesto el acento en que el Govern espera con la mano tendida "un cambio de posicionamiento de la Monarquía y del Estado". Aunque no ha querido especificar acerca de qué espera en concreto Torra, la portavoz del Ejecutivo catalán sí ha dicho que ayudaría que el Rey "diera un giro y recuperara el espíritu que hace unos años expresaron su padre, y él mismo, de respetar la voluntad del pueblo de Cataluña".

La decisión final del Govern sobre la presencia de Torra en Tarragona condicionará también el encuentro del Rey y el presidente de la Generalitat en la entrega de los premios Princesa de Girona. En cualquier caso, Artadi ha asegurado que la Generalitat entendería que hubiera protestas en la calle contra la presencia de Felipe VI. "La gente tiene derecho a expresarse. No se promueven desde el Govern, sino que corresponden a la sociedad civil. Sería una expresión de la ciudadanía, lo que no se puede hacer es silenciarla", ha dicho.