El portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, defendió este lunes la actuación de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado el 1-O, señalando que "estas cosas pueden pasar" cuando la Policía Nacional y la Guardia Civil, en cumplimiento del mandato judicial, tratan de que se cumpla la legalidad ante "una ilegalidad flagrante". El Govern catalán elevó a 761 los heridos en cargas policiales, mientras que nueve policías y dos guardias civiles resultaron heridos.

En una entrevista en la 'cadena Ser', el también ministro de Educación, Cultura y Deporte incidió en que "cuando sucede una cosa como esta (...) estas cosas desgraciadamente pueden producirse, se produjeron y todos lo lamentamos profundamente".

Del mismo modo, el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha defendido la actuación policial en Catalunya. En declaraciones en 'Antena3' y 'RNE', el ministro ha manifestado que la Policía Nacional y la Guardia Civil solo emplearon elementos antidisturbios en una intervención, concretamente en los alrededores del colegio Ramón Llull de Barcelona, al verse los agentes "acorralados" y en una situación "muy complicada".

Ese empleo de la fuerza fue "para evitar un mal mayor", ha justificado Zoido, que ha defendido que en algunos casos lo que se vio fue a los agentes ejercer "una mayor presión" para poderse abrirse camino entre quienes les impedían entrar en los centros de votación "a cumplir con lo que les había ordenado la autoridad judicial".

"Lamento los heridos de un lado y de otro. No es agradable ni ver esas imágenes ni ver a heridos", ha admitido. Zoido ha asegurado que los profesionales están "muy preparados" para soportar mucha presión. Durante el 1-O, hubo cargas incluso contra los bomberos y tensión entre los diferentes cuerpos policiales.

El ministro de Justicia, Rafael Catalá, calificó de "ejemplar" la actuación. "Por mucho que alguien haya tratado de poner el foco en lo contrario, yo miro cómo se comportan ante desórdenes públicos las policías de Estados cuyos medios de comunicación se alarman ahora, y creo que hubo respeto a los ciudadanos, mesura, proporcionalidad y que no se usó la fuerza salvo en casos extremos", ha señalado en 'TVE'.

También en esta línea, la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, afirmó este lunes que durante el 1-O España "ha vuelto a demostrar ser una democracia madura y consolidada" y que el referéndum ilegal fue una "farsa". Báñez señaló que la respuesta del Gobierno al referéndum ilegal fue equilibrada y agradeció la actuación "de quienes están en la legalidad" y los que velaron por ella, especialmente a la Policía y la Guardia Civil.