Gobierno y PP se están afanando desde primera hora en difundir que en "España no hay presos políticos", en respuesta a la reacción del independentismo, con Carles Puigdemont a la cabeza, de rechazar el golpe judicial a los líderes de Òmnium, Jordi Cuixart, y la ANC, Jordi Sànchez, como un "encarcelamiento de ideas" y la vuelta a los "presos políticos en España".

"No están la cárcel por sus ideas, sino por sus actos", ha subrayado la ministra de Sanidad, Dolors Monserrat, mientras que la de Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, ha achacado la reacción de Puigdemont y otros dirigentes catalanes al "delirio independentista", que en su opinión está haciendo que Catalunya "padezca dolor".

A su juicio, lo normal es que la justicia actúe porque, de lo contrario, sería "la ley de la selva". En la misma línea, el coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maillo, ha señalado que, en España, "el que la hace, la paga", igual en su opinión que sucede con los escándalos de corrupción.

EL "DESTROZO" DE TRES COCHES DE LA GUARDIA CIVIL

Maillo ha comentado que Cuixart y Sànchez han sufrido las mismas consecuencias que cualquier otro ciudadano que hubiera "destrozado tres coches de la Guardia Civil y hubiera intentado evitar el trabajo de una comisión judicial".

Todos ellos han incidido además en que en España hay "separación de poderes" y han acotado la decisión de la jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamena exclusivamente al ámbito judicial, sin mencionar que la fiscalía -que depende jerarquicamente del Fiscal General, nombrado por el Gobierno- pidió que fueran encarcelados. "Los independentistas dibujan una España represora que solo está en el imaginario de los independentistas", ha declarado Maillo.

Mientras que el vicesecretario de comunicación del PP, Pablo Casado, ha subrayado que el Gobierno "no incide, ni valora ni presiona al Poder Judicial. Eso pasa en otro tipo de sistemas políticos, no en una democracia consolidada como la española".

EL LLAMAMIENTO A PUIGDEMONT

Por otro lado, la ministra de Sanidad ha afirmado que Puigdemont, Junqueras y Forcadell están "arrollidados” ante los “antisistemas” de la CUP y la ANC y Òmnium Cultural, “que nunca se han presentado a las elecciones”. "El independentismo lleva a la confrontación social y a la no estabilidad económica. El Gobierno de España no va a dejar solo a ningún catalán, nos haya votado o no; porque Cataluña es parte de España, no vamos a abandonar a Cataluña".

Montserrat, que también ha denunciado que su casa ha sufrido pintadas de “fascista” esta noche, ha pedido a Puigdemont “que no pierda la oportunidad que tiene hasta el jueves a las 10". "Rajoy lo puso fácil, solo tenía que contestar sí o no. Lo que está dando desasosiego es que nadie sabe qué pasó el 10 de octubre”, ha indicado, para luego subrayar que en política “una hora es una vida”.

La titular de Sanidad también ha insistido en el diálogo, pero dentro de la ley: “No ha contestado a la pregunta del Gobierno de España y tiene un segundo plazo. Lo primero es volver a la legalidad”, ha dicho la ministra, antes de mandar un mensaje de tranquilidad a Cataluña.