El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y el exconseller Comín lograron escaño como eurodiputados en las elecciones europeas del pasado domingo. Ayer, como algunos otros electos, acudieron al Parlamento Europeo en Bruselas a recoger la acreditación provisional que concede la institución a los nuevos electos para facilitar el acceso a la sede. Pero la Eurocámara se las denegó a ambos y les denegó el paso.

«El secretario general del Parlamento Europeo (Klaus Welle) ha dado instrucciones para que ni Toni Comín ni Oriol Junqueras ni yo podamos hacer ningún trámite como eurodiputados. Sin ninguna razón legal. Todos los otros electos han podido hacer los trámites que a nosotros nos han impedido. Vergüenza», denunció Puigdemont.

El acceso a esta acreditación, según la Eurocámara, está supeditado a la recepción de las notificaciones oficiales de las autoridades nacionales con la lista oficial de los diputados, convocados a acatar la Constitución el 17 de junio en el Congreso. La institución, según las fuentes consultadas, puede sin embargo decidir no conceder ninguna facilidad hasta asegurarse de que la persona ha obtenido realmente el acta de diputado. Es lo que ocurrió con Puigdemont y Comín.

«Para acceder solo era necesario acreditar tu identidad en base a una lista que ellos tenían. Hemos visto que había tres nombres que estaban señalados en gris (en referencia a Puigdemont, Comín y Junqueras)», corroboró Pernando Barrera, representante de la izquierda aberzale, que al igual que Diana Riba y otros electos como José Ramón Bauzá (Cs) sí pudieron cumplimentar este requisito y acceder a la sede.

Puigdemont anunció que pedirá explicaciones al presidente de la Eurocámara, Antonio Tajani, y al secretario general de la institución, Klaus Welle, a quienes responsabiliza de lo ocurrido. SILVIA MARTÍNEZ