El PSOE de Susana Díaz volvería a ganar las elecciones andaluzas del próximo 2 de diciembre con el 37,4% por ciento de los votos, aunque se vería obligada a pactar para mantenerse al frente de la Junta de Andalucía y garantizar los 41 años de gobierno ininterrumpidos del socialismo en la región. Así lo señala la estimación del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que avala un descalabro del PP. El partido de Juan Manuel Moreno Bonilla pierde 13 escaños y disputaría el segundo puesto junto a Ciudadanos y Adelante Andalucía (Podemos e IU), que obtienen un empate técnico a escaños. El sondeo apunta además a que la volatilidad de la derecha se vería acentuada por la irrupción, por vez primera en el parlamento regional, de Vox, que ganaría un escaño en Almería y lograría el 3,17% de los votos.

El sondeo prelectoral del CIS, realizado en la segunda quincena de octubre y con cerca de 4.900 encuestas en 290 municipios andaluces, apunta que el PSOE obtendría entre 45 y 47 escaños, muy similar a los que tiene en la actualidad. Aunque no logra la mayoría absoluta (cifrada en 55 escaños), tiene claras opciones de gobernar, ya que obtiene los mismos diputados que PP y Cs juntos. En este sentido, y pese al pesimista escenario que dibujan los encuestados, que consideran que la gestión socialista en los últimos años es regular, mala o muy mala y apuntan de forma mayoritaria su deseo de un cambio tras 40 años de gobierno de un mismo partido, la alianza de las derechas no logra convertirse en una alternativa a ojos de los andaluces. De ahí que Díaz pudiera llevar a cabo su proyecto de “gobierno de banda ancha”, gobernando en minoría con apoyos puntuales de distintas fuerzas políticas.

Los andaluces vuelven a situarse como un territorio más inclinado a la izquierda y el centro izquierda, lo que justifica que la coalición Adelante Andalucía se sitúe como segunda fuerza política en cuanto a estimación de voto, con el 19,34 por ciento de los apoyos, aunque se mantendría con los 20 escaños actuales (15 de Podemos y 5 de IU). Por detrás se situarían PP, con el 18,66 por ciento de los votos, y Cs, con el 18,55 por ciento. No obstante, los conservadores sacarían ventaja del reparto de escaños y podría moverse entre los 22 y los 20 diputados, 13 menos de los que tiene actualmente, perdiendo escaños en todas las provincias y convirtiéndose en la cuarta fuerza en Sevilla, donde la lista la encabeza el ex ministro Juan Ignacio Zoido, o la tercera en Malaga, circunscripción por la que se presenta su candidato Juan Manuel Moreno Bonilla.

Cs se movería en la misma horquilla de entre 20 y 22 escaños, y aunque no logra el ansiado ‘sorpasso’ aumenta espectacularmente sus resultados, dado que en la actualidad cuenta con 9 escaños. La novedad es la irrupción de Vox, el partido de ultraderecha que obtendría el 3.17 por ciento de la estimación de voto y se convertiría en la quinta fuerza política de la cámara con un diputado.

Los datos del CIS no dejan bien parado al PSOE, pese a que Susana Díaz sigue siendo la líder mejor valorada con una nota de 4,1. Le siguen Antonio Maíllo (Adelante Andalucía), con un 3,5; el líder de Cs, Juan Marín, también con 3,5; Teresa Rodríguez (Adelante Andalucía) con 3,4 y en último lugar el presidente del PP, Juan Manuel Moreno Bonilla, que saca un 3,1. Las respuestas de los entrevistados denotan el hartazgo de 36 años de gobiernos socialistas en la Junta de Andalucía, y el 58 por ciento de los encuestados apuntan que les gustaría un cambio en el partido de gobierno.

El escenario que deja la gestión de Díaz en la última legislatura da que pensar a los socialistas. El 93,9 por ciento de los andaluces consideran regular o mala la situación económica de la región, con el paro y la corrupción como principales problemas. El 76,1 por ciento entiende que la legislatura, en la que Díaz estuvo más preocupada de su posible salto a Madrid para liderar el PSOE, ha pasado en blanco en cuanto a gestión económica, que está igual o peor que hace tres años. La situación política tampoco genera muchas expectativas entre los andaluces, y el 58,9 por ciento de los andaluces estiman que es mala o muy mala en estos momentos. De nuevo, el balance de los tres años de gobierno de la presidenta Susana Díaz se salda en rojo para la socialista, ya que el 43,7 por ciento de los encuestados consideran que su gestión ha sido mala o muy mala frente al 15,5 que creen que ha sido buena o muy buena.

No obstante, la encuesta del CIS deja claro la contradicción de que el PSOE sigue siendo el partido que más simpatía suscita, el que mejor defiende los intereses de la región o el más capacitado para gobernar, de ahí que el 65,1 por ciento de los encuestados crean que es la formación que va ganar.

De los 109 escaños que forman el Parlamento de Andalucía, el PSOE tiene actualmente 47; le sigue el PP con 33; Podemos obtuvo 15; Ciudadanos, 9; e IU se quedó con 5. Los escaños de Ciudadanos fueron determinantes para el arranque de la legislatura en el 2015. Fueron los que permitieron que Díaz alcanzase la cifra necesaria en votos para lograr su investidura como presidenta de la Junta, aunque tuvo que someterse a cuatro votaciones para conseguirlo.

La campaña electoral se iniciará este viernes y finalizará el 30 de noviembre. La sesión constitutiva del nuevo Parlamento, tras los comicios, tendrá lugar el 27 de diciembre.