La Policía Nacional ha detenido este miércoles a un individuo de 52 años de edad y origen español por su presunta integración en el Estado Islámico, organización para la que desarrollaba tareas de captación, adoctrinamiento y adiestramiento de yihadistas. Se da la circunstancia de que el arrestado ya había sido detenido y condenado a nueve años de prisión por su integración en Al Qaeda. De hecho, fue el primer condenado en España por su relación con los atentados del 11-S en Estados Unidos. Salió en libertad en el 2011.

El detenido había desarrollado un sofisticado modus operandi virtual para llevar a cabo una activa labor de propaganda masiva de Estado Islámico en internet al objeto de no ser detectado. Hacía acopio de una importante cantidad de material el cual alojaba de manera simultánea en varios de sus perfiles, o a través de hilos de mensajería instantánea para alcanzar al mayor número de personas. Para ello empleaba el lenguaje virtual habitual en estos foros, comentando, linkeando o compartiendo contenidos como parte de la estrategia global de Daesh --otro nombre con el que se conoce a Estado Islámico-- de emplear las redes para captar fieles.

TÉCNICAS DE COMBATE

El detenido no solo se dedicaba a adoctrinar, sino que también adiestraba en técnicas de combate a futuros terroristas. Con este objetivo, publicaba vídeos en los que él mismo aparecía manejando armas blancas con gran destreza, acompañados de mensajes altamente explícitos, dirigidos a la comisión de acciones terroristas. Incidía especialmente en la preparación psicológica de los nuevos reclutas, a los que preparaba mentalmente para que finalmente mostraran su disposición a cometer atentados terroristas con argumentos de mandatos divinos sobre el martirio.

Condenado por su integración en la organización terrorista Al Qaeda, tras su puesta en libertad, el detenido había desarrollado en los últimos años un perfil afín a la figura del cibersoldado, la versión 2.0 del combatiente yihadista que emplea la red informática para compartir, interactuar y propagar el ideario terrorista. Lejos de reconducir su conducta, el detenido había implementado sus acciones como parte de su compromiso con los postulados ideológicos y terroristas de Estado Islámico.

COMPROMISO CON LA YIHAD

El detenido, que ha pasado nueve años en la cárcel por "pertenencia o integración en organización terrorista y tenencia ilícita de armas", salió de prisión en mayo del 2011. A pesar de haber afirmado en declaraciones a los medios de comunicación que él buscaba "vivir en paz" y afirmaba no ser un terrorista, continuó siendo objeto de seguimiento por parte de los agentes de la Policía Nacional, que detectaron que había renovado su compromiso desarrollando actividades de muyahidin virtual para cumplir con los requerimientos de la Yihad Virtual o Electrónica y actividades de adiestramiento operativo de terceros dentro de la Yihad Violenta.

La operación, que continúa abierta, se ha desarrollado bajo la supervisión del Juzgado Central Instrucción Número dos y coordinación de la Fiscalía de la Audiencia Nacional.

Desde el 26 de junio de 2015, fecha en el que el Ministerio del Interior elevó a 4 el Nivel de Alerta Antiterrorista (NAA), las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad han detenido a 207 terroristas yihadistas en operaciones realizadas en España y en el exterior y a un total de 250 desde principios de 2015.