La Diputación Permanente, el órgano que sustituye al pleno del Congreso fuera del periodo de sesiones, ha rechazado este martes todas las comparecencias de miembros del Gobierno reclamadas por la oposición. Pedro Sánchez no tendrá que dar explicaciones ante todo el hemiciclo por los incidentes que afectaron a miembros de Cs en la reciente marcha del Orgullo Gay en Madrid, ni Josep Borrell, ministro de Exteriores, por el presunto "espionaje" a las delegaciones de la Generalitat al exterior.

Tampoco el titular de Interior, Francisco Grande-Marlaska, deberá aclarar ante el Pleno la situación de los residentes en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE), de Zapadores, en València, donde a mediados de este mes falleció tras una reyerta un inmigrante de origen marroquí. Esta última petición, sin embargo, no se ha llegado a votar, ya que los socialistas se han mostrado dispuestos a que el ministro comparezca próximamente en comisión.

La rendición de cuentas de Sánchez por lo ocurrido en el Orgullo había sido pedida por el PP, Cs y Vox. Solo los tres partidos de derecha la han apoyado, sumando 29 votos, frente a los 40 en contra de todos los demás grupos.

La necesidad de que Borrell diese explicaciones venía respaldada por ERC y Junts per Catalunya, que han sumado seis votos junto a Bildu y el PNV. Podemos, con ocho miembros en la Diputación Permanente, se ha abstenido. El resto de grupos, del PSOE al PP, pasando por Cs y Vox, se han posicionado en contra, alcanzando la cifra de 55 votos.