El ministro de Exteriores en funciones, Josep Borrell, ha desmentido "rotundamente" al líder de Podemos, Pablo Iglesias, quien afirmó el miércoles que desde su ministerio le admitieron que fue "un error reconocer" a Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela.

"En cuanto a las hipotéticas conversaciones de no se sabe quién en el Ministerio de Asuntos Exteriores, de no se sabe quién con Podemos, debo desmentirlas rotundamente. No tengo ninguna constancia de que nadie en el Ministerio de Asuntos Exteriores haya hablado con nadie del partido político del señor Iglesias", ha indicado Borrell durante su visita en Jordania.

"QUE NO TIRE LA PIEDRA Y ESCONDA LA MANO"

Borrell señaló que "si quiere hacer referencia a presuntas conversaciones privadas, que no tire la piedra y esconda la mano y que diga quién protagonizó esas conversaciones, cuándo y cómo se produjeron porque yo las desconozco completamente y debo decir que carece de todo fundamento".

Iglesias afirmó que "Guaidó no quiere unas elecciones libres, quiere un golpe de Estado que provoque una intervención de Donald Trump y un baño de sangre en Venezuela", y añadió que "el ministro de Exteriores (Josep Borrell) sabe que tenemos razón y en privado nos han reconocido que efectivamente era un error reconocer a un presidente que no quiere convocar elecciones libres".

Ante esto, Borrell aseveró que "lo grave" es que Iglesias "acusa al señor Guaidó (...) de no querer convocar unas elecciones libres en Venezuela".

"NO ENTIENDO A QUÉ VIENE ESA ACUSACIÓN"

Y se pregunta: "¿Cómo se puede criticar o acusar al señor Guaidó, reconocido como presidente interino para convocar elecciones de no querer hacerlo? Francamente no entiendo a qué viene esta acusación al señor Guaidó".

El presidente del Gobierno español en funciones, Pedro Sánchez, reconoció el pasado 4 de febrero oficialmente a Juan Guaidó como presidente encargado de Venezuela y, hasta el momento más de cincuenta países ya han seguido este paso.

Guaidó llevó a cabo un levantamiento militar este martes junto a cerca de 40 militares que se dirigieron a la base de La Carlota, que volvió a prender la mecha de las manifestaciones opositoras en Venezuela.