El dramaturgo Albert Boadella ha definido hoy al independentismo como una secta "difícil de desprogramar", al estar influida por una "política paranoica" y por las escuelas, para considerar a España como "el enemigo de todo".

El fundador de El Joglars y "presidente en el exilio de Tabarnia" se ha referido así al independentismo catalán como "una de las sectas más importantes del mundo, con dos millones de personas".

"Dejar que la gente cambie de idea política es muy sencillo, pero desprogramar una secta es complicado", ha manifestado en declaraciones a los medios de comunicación previas a un encuentro con empresarios en Zaragoza.

Y como solución a algo que ha dicho que es "muy complicado" y para lo que deberían intervenir "psiquiatras, psicólogos e incluso loqueros" ha propuesto una "situación muy ejemplarizante".

Así, ha hecho alusión al artículo 155 de la Constitución, que hay que aplicar "sin límite", puesto que, en sus palabras, el 155 de "la puntita nada más" fue lo peor que se pudo hacer.

"Si se aplica, por poner un ejemplo, durante dos años, los catalanes e incluso la secta verían que todo sigue funcionando exactamente igual: que se habla catalán en las escuelas, la enseñanza sigue igual, que TV3 existe aunque el mensaje no sería seguramente el mismo...", ha ilustrado el director de teatro barcelonés.

Y es que, Boadella ha remarcado que los distintos gobiernos de España han tenido una gran responsabilidad por "haber dejado crecer al niño minado", y ha advertido: "Los niños mimados, cuando son tan mimados, acaban quemando la casa y matando a los padres".

El dramaturgo, "presidente en el exilio" desde hace unos meses de la ficticia comunidad de Tabarnia, ha recordado que esta plataforma nació como "una necesidad catártica de muchos ciudadanos, por lo menos, de reír del ridículo al cual asisten".

Aunque ha señalado que detrás de esta respuesta en clave de humor hay "un aviso serio": "Si se acaba consiguiendo el derecho a decidir, es posible que haya derecho a decidir en muchas partes, como en la región de Tabarnia, y pida el derecho a decidir el continuar siendo una autonomía de España".

"O Barcelona por sí sola, porque es posible que tenga más voto constitucionalista que independentista", ha lanzado como hipótesis.

En cuanto al derecho a decidir, lo ha considerado como "realmente lógico" en un contexto de colonizaciones o invasiones, aunque para él no tiene "ningún sentido" en la Europa actual.

"Pero si se juega a esto, la Moraleja, que es el barrio más rico de Madrid, también podría pedir la independencia, ¿por qué no?", se ha preguntado ante una situación que le parecería un "desmadre" y la "destrucción de Europa", sin la que "las cosas irían muy mal".

Y en cuanto a la polémica visita del líder de Podemos, Pablo Iglesias, a Oriol Junqueras en prisión, Boadella ha dicho que se trata de una acción que entra en "la demencia política", mientras que "el otro se lo tolera", en referencia, sin nombrarlo, al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez