El comité federal del PSOE puso en marcha ayer el proceso para las elecciones primarias, lo que abre la guerra de los avales entre los candidatos que aspiran a ocupar la secretaría general de la formación. Susana Díaz dejó claro que para ella el aval de un militante es más importante que tener amigos. Los seguidores de Pedro Sánchez (él no es miembro del comité federal) consideran que la gestora les resta posibilidades para la recogida de firmas. Patxi López manifestó que no tiene problemas con el procedimiento.

La presidenta de la Junta de Andalucía se va a volcar en la búsqueda de avales para mostrar desde el inicio del proceso que cuenta no solo con un amplio respaldo de los dirigentes actuales e históricos del PSOE, como se vio en la puesta de largo de su candidatura hace una semana, sino también del apoyo mayoritario de la militancia.

PALABRA Y COMPROMISO / «Yo respeto mucho un aval, porque cuando avalas a una persona das tu palabra, te comprometes y eres capaz en ese momento de representar a esa persona», dijo en Madrid, antes de viajar a Canarias donde reiteró que «ser compañero (de partido) es algo grande, es más que ser amigo».

Los candidatos a las primarias, que se celebrarán el 21 de mayo, deberán ser avalados por el 5% del censo del partido, que según las cifras provisionales asciende a un total de 177.902 afiliados. Es decir, se necesitarán como mínimo 9.000 firmas para conseguir el derecho a presentarse a las elecciones. Aún faltan por sumar las incorporaciones de los últimos días, según la gestora.

El censo definitivo se cerrará el 28 de abril y una semana después, el 4 de mayo, los candidatos deberán presentar las firmas de los militantes que les apoyan. Aún habrá tres días más para confirmar que la documentación es correcta y no hay errores en los avales. Así pues, el 8 de mayo los aspirantes proclamados comenzarán la campaña interna.

En la reunión de ayer, solo seis miembros del comité federal, afines a Sánchez, expresaron su oposición al proceso. Su principal recriminación fue no poder disponer del censo definitivo hasta pocos días antes de presentar los avales.

«Tienen que darse las garantías suficientes para tener un congreso como queremos todos, un proceso limpio, claro, transparente, participativo, positivo», dijo el valenciano José Luis Ábalos, coordinador de la candidatura del exsecretario general. Según Mario Jiménez, portavoz de la gestora, «los precandidatos saben que no pueden disponer del censo para la recogida de avales», que solo será utilizado para verificar la autenticidad de las firmas.

Ya en Canarias, Susana Díaz hizo un llamamiento anoche al respeto entre los candidatos y a una campaña «en positivo, pensando en el partido, en los ciudadanos y en el país». Díaz, que participó en un acto con afiliados en Las Palmas de Gran Canaria, pidió que «la palabra compañero esté por encima de todo y hablemos bien de quienes compartimos un proyecto». Asimismo, insistió en la necesidad de sumar voluntades, sin enfrentar a los ciudadanos.

A su juicio, las primarias son una oportunidad, pues pueden permitir que los votantes que en otras elecciones apoyaron a ese partido y le dieron la victoria, vuelvan a hacerlo.

Por otro lado, un solo voto en contra tuvo el acuerdo de colaboración entre el PSC y el PSOE, ratificado ayer tras rubricarlo a comienzos de este mes Miquel Iceta y Javier Fernández. Fue el de Alberto Domínguez, miembro de la corriente Esquerra Socialista, por la abstención en la investidura de Mariano Rajoy.