La Junta Electoral ha prohibido al Ayuntamiento de Barcelona que las fuentes municipales y las fachadas de los edificios públicos se iluminen de amarillo en recuerdo de los exconsejeros presos. El organismo, que ha dado la razón al PP, considera que esa iluminación afecta a la neutralidad institucional en plena carrera hacia el 21-D. El ayuntamiento decidió en comisión municipal respaldar con la iluminación amarilla a los encarcelados por el procés.