La irrupción de la ultraderecha de Vox en España, país que hasta ahora parecía estar al margen del auge ultra que se vive en Europa, y la posibilidad de que entre en el Congreso en estas elecciones generales del 28-A, así como la polarización que se vive a raíz del conflicto en Cataluña son dos factores vistos con extrema preocupación en la comunidad internacional. En los últimos días prestigiosos medios de comunicación como 'Financial Times', 'The Economist' o 'Foreign Policy' han expresado esta inquietud por dicha polarización, que atribuyen al 'procés' y a Vox, y han alertando de la inestabilidad política que puede haber en España tras los comicios de este domingo.

El último en hacerlo ha sido el británico 'Financial Times', que en su editorial de este jueves, titulado 'Una polarizada España necesita encontrar un espíritu de cooperación', pedía abiertamente dar crédito a Pedro Sánchez por su moderación. En este sentido, el diario recuerda que durante muchos años España ha sido un oasis de estabilidad mientras otros países del sur de Europa caían en la inestabilidad económica y política y lamenta que la situación ha cambiado ya que, afirma, el país se ha polarizado "a niveles nunca vistos desde el inicio de la transición, tras la muerte de Franco". Y plantea las causas: "la política se ha radicalizado por el intento ilegal de independencia en Cataluña y por la virulenta reacción que ello ha provocado en los nacionalistas españoles. El súbito ascenso de Vox ha arrastrado a los liberales y a los conservadores hacia la derecha, que explica, han pugnado esta campaña por ver cuál de los tres partidos está en la línea más dura frente a Pedro Sánchez.

El 'Financial Times' valora positivamente el hecho de que Sánchez ha mantenido un perfil moderado y de estadista durante esta campaña y considera que ello le facilitará la formación de gobierno, "si le va suficientemente bien este 28-A", con una alianza "con Podemos, los nacionalistas vascos y otros partidos regionales pero sin los secesionistas catalanes". El diario apunta que "sobre el papel" una coalición PSOE-Cs "podría ser lo mejor para la economía" pero apunta que Albert Rivera la ha descartado y "hay mucha mala sangre entre él y Sánchez".

UNA COSA ES ANDALUCÍA Y OTRA, LA EUROZONA

La alternativa a esos pactos poselectorales, la de la alianza de las tres derechas, no es del agrado del diario, que augura que la coalición estaría plagada de contradicciones políticas y que podría inflamar las tensiones regionales. "Unir fuerzas para acabar con 37 años del PSOE en Andalucía es una cosa. Liderar la cuarta economía de la eurozona es otra", avisa el diario económico, que apela al diálogo --"Sánchez sabe que solo con diálogo se podrá salir del impasse catalán-- y a "redescubrir el espíritu de la cooperación".

En la misma línea, otro medio económico, en este caso 'The Economist', apuntaba hace unos días que 'Más parálisis política no hará bien a España' y pedía el voto para los socialistas. El semanario advierte de que tras los ocho meses de Gobierno en minoría del PSOE, "la parálisis política solo puede empeorar". "Las opciones tras el 28-A serán otro gobierno en minoría, una argumentada coalición o, más probablemente, nuevas elecciones".

EL PACTO PP-CS-VOX, MAL PASO

Respecto a los posibles pactos poselectorales, 'The Economist', como 'Financial Times' vería bien un acuerdo PSOE-Cs pero lamenta que el radical posicionamiento de Rivera en el tema catalán no lo haga posible. "Triste, porque en otros aspectos, Cs sería una poderosa influencia promercados en Sánchez". No es el semanario muy partidario del pacto con Podemos: "Un peligro sería que un gobierno socialista optara por aliarse con Podemos, cosa que frustraría parte de su agenda y pondría en riesgo el presupuesto".

Para 'The Economist' la alternativa a estas dos opciones, la del gobierno de derechas PP-Cs, ofrece una "perspectiva preocupante": "solo ofrecería confrontación a los independentistas catalanes y seguramente necesitarían a Vox para tener mayoría". En este sentido, avisa de que "para un país que ha combatido los fantasmas del nacionalismo de Franco, ese (el pacto PP-Cs-Vox) sería un paso en la mala dirección". Lo "ideal", concluye, es que "los españoles votaran por Sánchez con unas cifras suficientes para que no necesitara aliados, pero eso parece muy improbable".

ENTRE VOX Y LOS INDEPENDENTISTAS

'Foreign Policy' planteaba así el panorama que se abre tras el 28-A: "un gobierno influenciado por un partido xenófobo u otro bajo la constante amenaza de los separatistas". Esta revista especializada destaca que el auge de Vox ha rebatido la idea popular de que la larga experiencia de España con la dictadura hacía al país inmune al populismo de la extrema derecha, pero apunta que esta reaparición de la ultraderecha se debe "en realidad" al "resurgir del nacionalismo español impulsado por el intento de independencia de Cataluña".

Para este medio, tanto un gobierno con Vox como otro con apoyo de los independentistas "supondría un considerable peligro para la democracia española.