La gran mayoría de los candidatos en los pueblos de la provincia fueron madrugadores y acudieron a votar en las primeras horas de apertura de los colegios electorales, si bien hubo quien lo dejó para casi el mediodía, cuando ya el calor era notable. La jornada electoral registró una participación similar a la de hace cuatro años y en ella destacaron numerosas quejas por la falta de intimidad propiciada por la falta de espacio para todas las papeletas en las cabinas.

La jornada electoral se desarrolló en Lucena con total normalidad en los 13 colegios electorales y 41 mesas habilitadas para que los ciudadanos depositaran su voto en Lucena, Jauja y Las Navas del Selpillar. Estaban llamados a las urnas 32.982 lucentinos, y se registraron algunas quejas por la concentración de mesas en el CEIP del Valle -7 en total-, en las que había censados unos 7.000 vecinos.

En Puente Genil, en IES Andrés Bojollo hubo un problema con las cerraduras que retrasó unos minutos la apertura del centro. Por lo demás, a partir de la una del mediodía y en el último tramo de la tarde fue cuando más pontanenses depositaron su voto en alguna de las urnas de los 35 colegios.

En Cabra el candidato socialista, Antonio Jesús Caballero, y el grupo de militantes con los que se dirigía a votar llegaron ante las urnas mojados, tras recibir una descarga de agua, al parecer de forma accidental, cuando pasaban bajo un balcón a escasos metros del colegio electoral.

En Priego la jornada electoral se desarrolló con la normalidad propia de un domingo de comuniones en el que, además, la hermandad del Nazareno celebraba el desfile de su imagen titular, lo que desde primeras horas de la tarde restó protagonismo a la cita con las urnas.

En Baena, el número de concejales baja desde ahora de 21 a 17, mientras que las candidaturas han subido a cinco.

La jornada electoral en Pozoblanco discurrió sin incidentes. Sin embargo, durante todo el día numerosos votantes mostraron su malestar por la falta de intimidad debido a las miradas «indiscretas» de representantes de distintos partidos en casi todos los colegios electorales a la hora de coger las papeletas para las elecciones europeas, que se encontraban en mesas fuera de las cabinas al no caber dentro de estas. Estas quejas se hicieron patentes incluso en las redes sociales, donde algún votante señaló que había realizado una reclamación por escrito y otros, que llevaban el sobre de las locales preparado desde casa, desistieron de votar a las europeas por este hecho.

En Palma del Río, las 21 mesas abrieron con normalidad en los tres distritos electorales para un censo de 16.261 electores. Seis candidaturas optaban a una corporación de 21 concejales, frente a las cinco del 2015. Como siempre, los mayores fueron los primeros en ir a depositar el voto, quizás temiendo a las altas temperaturas.

En Montilla, el PP tuvo que retirar una pancarta por encontrarse muy cerca de un colegio electoral. Además, una quincena de personas mayores y con problemas de movilidad se beneficiaron del servicio especial de transporte adaptado que Cruz Roja brindó durante la jornada.

En Rute, el candidato socialista, actual regidor y secretario general del PSOE cordobés, Antonio Ruiz, votó en la ludoteca municipal. El PP planteó una incidencia al secretario municipal, al considerar que la alcaldesa pedánea de Zambra «ha cogido unas papeletas y unos sobres de este colegio y yo creo que eso no se puede hacer», dijo David Bazuelo.

En Fuente Palmera, muchos ciudadanos acudieron a votar muy elegantes por las comuniones, ya que aprovecharon antes de la celebración o justo a la salida para acudir a su cita con las urnas. Desde hace varias citas electorales, los vecinos de La Herrería votan en La Peñalosa.

Y en Fuente Carreteros tampoco destacó ninguna incidencia en las que han sido sus primeras elecciones locales como municipio. Sus 920 electores estaban convocados en una sola mesa para elegir a nueve ediles. La normalidad fue también la nota dominante en Posadas y La Carlota. Salvo algunas papeletas que estaban del revés en varias mesas, no se registraron incidencias en los cuatro colegios malenos.

En Aguilar, las 15 mesas de los diez colegios electorales se constituyeron con normalidad. Los más mayores madrugaron para votar. De hecho, a las ocho y media de la mañana un anciano se presentó en el CEIP Doña María Coronel, preparado para echar los sobres en las urnas. Además, varios de ellos acudieron a votar con su tarjeta sanitaria. También aquí hubo quejas por la poca privacidad debido al reducido espacio.

En Los Pedroches fue por la mañana cuando acudió a votar la mayor parte de los candidatos en los 17 municipios. En Dos Torres, los miembros del colegio electoral de la Biblioteca Municipal se llevaron una sorpresa al ver aparecer a unos recién casados, aún con sus trajes de la celebración. Eran Elena Sánchez y Ricardo Moreno, que se casaron el sábado en la parroquia y al terminar la fiesta fueron de los primeros en votar, antes de descansar. Y en Belalcázar se repitió la tradicional estampa de las monjas de clausura yendo juntas a votar.

En Castro del Río, el alcalde, José Luis Caravaca, fue el primer elector en depositar su voto en las urnas de su colegio, en el Pósito Municipal.