El PP celebró ayer un mitin de precampaña en el Colegio Mayor de Nuestra Señora de la Asunción en Córdoba enviando a los asistentes mensajes sobre la unidad y la defensa de España, realizando críticas a la izquierda por su gestión y apelando a la necesidad de concentrar el voto para que esta fuerza gane las próximas elecciones generales. En esta línea, su líder nacional, Pablo Casado, afirmó ante un millar de personas (unas 2.000 según fuentes de la organización) que el 28 de abril «vamos a evitar que en España manden los terroristas, los independentistas y los comunistas, no lo vamos a permitir», aseguró.
El candidato popular acusó a los políticos socialistas de «mentirosos» y explicó que «se está prometiendo lo que no pueden cumplir ni pagar». De este modo, abundó en que «lo más grave es que lo prometen cuando se han disuelto las Cortes y que lo pretenden aprobar con los enemigos de España», y realizó un ejercicio de ironía, afirmando que «si imaginamos al Gobierno de Pedro Sánchez en el futuro, ya tenemos al ministro de Interior, Pablo Iglesias; al ministro de Exteriores, Puigdemont; el de Justicia, Torra, y ahora tenemos al ministro Otegui».
Ante candidatos, militantes y simpatizantes, Casado subrayó que «la alternativa es el PP» y que en los comicios legislativos «estamos votando la disolución de España tal y como la conocemos o el mantenimiento del sistema democrático». Así, aludió al escenario político actual y aseveró que «nunca había visto tal indignidad, que un Gobierno socialista esté rogando los votos de Bildu y que acepte que se regodee, diciendo no solo que son decisivos, sino que dejen de criticarlos porque para terroristas ellos con los GAL».
El líder popular adelantó algunas de sus propuestas para el gobierno del país y comenzó anunciando que «vamos a defender la unidad, la Constitución y la dignidad de las víctimas del terrorismo». En segundo lugar, destacó que «somos especialistas en gestionar la economía» y que el PP volverá a generar «millones de empleos». Junto a esto, se dirigió al presidente de la Junta, Juanma Moreno, presente en el acto, y le dijo que «queremos hacer en España lo que tú estas haciendo en Andalucía», por lo que planteó la supresión del impuesto de patrimonio y el de actos jurídicos documentados, y señaló que «bajaremos el IRPF por debajo del 40% y el de sucesiones por debajo del 20%, y extenderemos la tarifa plana para los autónomos de 12 a 24 meses».
De izquierda a derecha, Adolfo Molina, Miguel Abellán, Pablo Casado, Juanma Moreno y Andrés Lorite, ayer, en el mitin celebrado en Córdoba. FRANCISCO GONZÁLEZ
En asuntos sociales, Casado expuso, entre otras ideas, que «en 30 días la prestación o el servicio de dependencia tiene que estar garantizado». Asimismo, citó el impulso de estrategias contra «el drama de la soledad», para la mejora del sistema educativo y la erradicación del acoso escolar, y avanzó que si es presidente del Gobierno los toros regresarán a Televisión Española. Por último, abundó en que pelearán «por nuestra agricultura, ganadería, pesca, agroindustria, turismo de interior, la caza y los toros», y avanzó que permitirán una inmigración «ordenada».
El matador de toros Miguel Abellán, que es candidato popular al Congreso por Madrid, mostró su deseo de «contribuir a que la alarmante despoblación que hay en los campos no se produzca», para lo que «sería bueno cumplir con las necesidades básicas», precisó. Además, apuntó el objetivo de que los toros regresen a TVE. El acto fue introducido por Adolfo Molina, presidente del PP cordobés, y contó con la participación del presidente del Gobierno andaluz y de Andrés Lorite, cabeza de lista del PP para el Congreso por Córdoba. Este último aseguró ante los presentes que «la única alternativa a la pesadilla de Pedro Sánchez se llama Pablo Casado».
Entre el público estuvieron el consejero de Sanidad en el Gobierno andaluz, Jesús Aguirre; el portavoz popular en el Parlamento autonómico, José Antonio Nieto, y el candidato del PP a la Alcaldía de Córdoba, José María Bellido, sobre quien Casado avanzó que «recuperará el buen gobierno de esta ciudad».
El líder nacional fue más allá y entró en una polémica que ha tenido un largo recorrido en Córdoba, preguntando a Bellido «¿a que no vas a permitir que se expropie la Catedral de Córdoba como propone Podemos?», en referencia a la propuesta de este partido para recuperar los bienes inmatriculados por la Iglesia. Casado zanjó la cuestión explicando que «vamos a tener un gran alcalde, que va a hablar de lo que hace falta».
