El PSOE andaluz ha logrado sacarse la espina que decía tener clavada desde las elecciones andaluzas del 2 de diciembre, cuando los socialistas perdieron el poder después de 37 años al frente de la Junta. En este primer examen tras los comicios autonómicos, los socialistas han obtenido el 34,31% de los votos frente al 27,9% obtenido el pasado diciembre. Respecto a los últimas elecciones generales, los socialistas han pasado de los 20 diputados conseguidos en Andalucía a 24, situándose nuevamente como primera fuerza política en esta región (en 2016, el PP ganó en Andalucía). Han transcurrido poco más de cuatro meses desde que Susana Díaz dejó de ostentar la Presidencia de la Junta y, ahora, el ambiente en la sede del PSOE andaluz no se parece en nada al de diciembre, cuando prácticamente no se dejó ver nadie hasta que finalizó el recuento.
La secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, se mostraba anoche feliz por los resultados de las elecciones en España y Andalucía, y apostilló: «Sabíamos que los andaluces iban a hacer, con su voto, una moción de censura al trifachito». «Sabíamos que íbamos a ganar ¡y bien!, que íbamos a doblar a la derecha en Andalucía», subrayó Díaz en la comparecencia. Avisó a los partidos que gobiernan en esta comunidad que los ciudadanos «no se han resignado a un tripartito de la derecha que les condena a la involución».
El PP andaluz ligó los malos resultados electorales a la fragmentación del voto y puso ya su mirada en las elecciones municipales del 26 de mayo: «Este es un partido que siempre ha salido hacia adelante». La secretaria general del PP-A, Dolores López, fue la encargada de hacer la valoración de los resultados electorales, en ausencia de Moreno, en una intervención muy breve en la que felicitó al PSOE y admitió que los resultados de su partido no son buenos.
Adelante Andalucía asumió que el resultado que Unidas Podemos ha obtenido en Andalucía en las generales «no es el deseado», si bien celebró que ha habido «votos suficientes para parar a la derecha y sólidos para defender nuestros derechos fundamentales». Así se pronunciaron tanto el portavoz parlamentario de Adelante Andalucía y coordinador de IU-CA, Antonio Maíllo, como el responsable político de Podemos Andalucía, Pablo Pérez Ganfornina, que apuntó que, aunque «el resultado podría haber sido mejor, es suficiente para frenar a la derecha. Estamos profundamente orgullosos de que los votos en Andalucía hayan dicho no contundentemente a la derecha», agregó.
El líder andaluz de Ciudadanos (Cs) y vicepresidente de la Junta, Juan Marín, destacó que los resultados obtenidos por la fuerza naranja en Andalucía en las elecciones ponen sobre la mesa que se convierte «en la segunda fuerza política en Andalucía» mientras «otros se derrumban». «Hemos demostrado que se puede ser útil desde la oposición y muy útil gobernando», afirmó Marín en el hotel NH Collection, cuartel general del partido para el seguimiento de los resultados del 28A, donde aseveró que Cs «se consolida y está en permanente crecimiento frente a otros que hemos visto cómo se derrumban y no ofrecen ya una alternativa al conjunto de este país».
El líder de Vox en Andalucía, Francisco Serrano, dijo anoche tras conocer que su formación ha conseguido seis diputados en la comunidad, que «la Reconquista se hizo tras 800 años, y queríamos cambiar las cosas en siete meses». En su discurso ante los militantes y simpatizantes congregados en un hotel de Sevilla, Serrano declaró que acepta los resultados porque son unos demócratas, aunque señaló que «han ganado las elecciones quienes no creemos que van a trabajar por el bien de España».
