María Teresa González (Córdoba, 1967) es educadora social y pedagoga, y ha cursado un máster en coach. Desde el año 2007 trabaja con una oenegé con personas desfavorecidas, principalmente de la comunidad gitana, a las que forma para el empleo. «Es un trabajo muy bonito, que me llena muchísimo, porque son personas que tuvieron que abandonar pronto los estudios, y las recuperamos de ese vacío educativo para que puedan hacer prácticas en empresas», explica esta cordobesa que supo desde muy pronto que el suyo era ese camino. «Trabajé para una empresa privada de telefonía, pero decidí dar un cambio en mi vida y romper con esa seguridad».

Vive, desde hace 27 años, con su pareja, que se dedica a lo mismo que ella. Le encanta bailar y cantar, e incluso se dedicó una temporada a ello profesionalmente. Se considera «de izquierdas, sin estridencias ni extremismos», y vio la importancia de que la gente normal entrara también en política. Al dar este paso, espera poder aportar sus conocimientos sobre los problemas sociales de Córdoba.