Decía Walt Disney, el gran creador de mundos de fantasía, que hay más tesoros en los libros que en todo el botín pirata de La isla del tesoro. Una afirmación difícilmente refutable. El de la lectura es un hábito que se debe adquirir desde edades tempranas. Eso es algo que saben bien en la Fundación Cajasol y la Fundación José Manuel Lara, que este año convocaron la sexta edición del certamen escolar Mi libro preferido. La iniciativa, tan sencilla como enriquecedora, tiene por objetivo fomentar la lectura entre los más jóvenes a través de la escritura de un pequeño relato en el que comenten cuál es o ha sido el libro que más les haya gustado.

Se trata de un concurso de relatos para alumnos de 1º y 2º de ESO matriculados en centros educativos que se acojan al programa Comunica-PLC de la Consejería de Educación. En la provincia de Córdoba han participado 53 institutos y el jurado elegido como ganadora a Clara Molina Reyes, estudiante de 1º de ESO en el IES Inca Garcilaso de Montilla. Su libro favorito es Momo, del autor Michael Ende, creador también de la onírica La historia interminable. Para ella es increíble haber sido elegida entre tantos participantes, sobre todo porque «una vez participé en un concurso de relatos cortos y me dieron un accésit, pero nunca hasta ahora había ganado un premio, aunque me encanta la literatura».

Para Clara, Momo, obra que refleja la sociedad desde el punto de vista de una niña, es «uno de esos libros que te sumergen en una aventura de la que no puedes escapar, te atrapa y no puedes parar de leer.

Es atemporal, ya que se puede leer en cualquier época y por personas de diferentes edades, habla de temas cotidianos y habituales en la vida de cualquier ser humano como la amistad y el valor de las cosas sencillas, esas de las que no nos damos cuenta porque siempre vamos con prisa y son las que de verdad importan». El nivel de expresión y reflexión de Clara puede hacernos entender por qué ha salido ganadora de este certamen.

Parte de responsabilidad del buen hacer de esta alumna se debe achacar a Rafi Jiménez, su profesora de Lengua y Literatura. Ésta expone sin reparo que «¡menos mal que, además de Play Station, Nintendo, youtubers e influencers, sigue habiendo también libros en el mundo!». Para esta docente es reconfortante que siga habiendo adolescentes que prefieran la serenidad, la cultura y las experiencias ligadas a la lectura de un libro frente a las modas pasajeras y la velocidad a la que van las nuevas tecnologías. «El otro día leí en el nuevo libro de Juan José Millás que hubo una época en que corríamos como locos hacia la actualidad, hacia las tecnologías.

Sin embargo, hoy en día, es la actualidad y las tecnologías las que corren hacia nosotros, a veces con mala intención, de manera que tenemos que hacer lo contrario a lo de antes: salir huyendo de ellas. Aún hoy, hay alumnos que lo perciben así y optan por disfrutar con un buen libro. ¡No está todo perdido!», apunta Rafi. Y en este sentido, nos quedamos con otra reflexión de Clara sobre Momo, en la que explica que «este libro te ayuda a pensar, te enseña a valorar las pequeñas cosas y a disfrutar el ahora, lo que tienes y a quién tienes». Nada mal.