El IES Luis de Góngora oferta desde el año 2011 la enseñanza de chino, una materia que se imparte en el Aula Confucio y en la que este año se han matriculado un total de 45 alumnos repartidos entre 1º y 4º ESO. Así, también se imparte esta enseñanza con un carácter extracurricular, llegando a alcanzar la cifra de alumnado que estudia por la tarde un total de 102 estudiantes, un número que va aumentando considerablemente cada curso. Los alumnos de las clases extraescolares tienen edades comprendidas entre los seis y los sesenta años y están ubicados en clases según sus edades y nivel. Así, las clases son impartidas por dos profesoras, una de ellas voluntaria. Para poder impartir docencia, la profesora del Aula Confucio debe tener estudios relacionados con el español y pasar una prueba que realizan en China, mientras que el docente voluntario, tan solo necesita disponer de un grado universitario.

La metodología que se emplea en el Aula Confucio tiene de base la interacción entre el profesor y el alumnado, una metodología de enseñanza que no ha escogido el propio centro, sino que viene establecida por el marco europeo para las lenguas. «La metodología es parecida a la de cualquier clase de idioma, es decir, libro, diccionarios, pizarra digital, etc., pero también se introducen otros elementos, como recortables. Son muy aficionados a la creación de cuadros con el uso de las tijeras, y realmente hacen cosas dignas de admiración», afirma Salud Clavero, responsable de programa de chino en el IES Luis de Góngora.

Asimismo, cada vez son más los alumnos que optan por cursar esta asignatura que, según las familias, tan solo tiene un aspecto negativo, «la materia se imparte hasta 4ºESO y no tiene continuidad en Bachillerato, y esto, a algunos padres, les hace no optar por ella», indica Clavero. Sin embargo, aprender la lengua china es algo que los propios alumnos valoran de forma madura. «Creo que el principal atractivo que encuentran es la diferencia con respecto a las demás asignaturas, además de los novedoso». Así, entre las principales dificultades para el alumnado se encuentran la pronunciación y la gramática. «El aprendizaje de cualquier idioma es una ventana abierta al mundo, y si además es un idioma como el chino, con los millones de personas que lo hablan y el crecimiento económico que está teniendo, es obvio que es una opción más que recomendable», opina Clavero. Sin embargo, la dificultad no quita las ganas e ilusión de los alumnos por adentrarse en la cultura china. Tienen curiosidad por la costumbres y la idiosincrasia del país y eso es algo que también se procura cubrir en el Aula Confucio. «El Gobierno chino está muy interesado en que no solo se aprenda su idioma, saben de la dificultad del mismo, sino que también quieren que se conozca su cultura y sus costumbres.

El aula de aprendizaje de la lengua china es fruto de un convenio entre la Consejería de Educación y el Gobierno chino. Actualmente también se imparte como materia curricular en el CEIP Colón, como centro adscrito al IES Luis de Góngora, en los niveles de 5º y 6º de Primaria.