El Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, volvió ayer a plantear su convicción de que es necesario implantar la gestión compartida en el uso de la Mezquita, y, en respuesta a la demanda de la plataforma Mezquita-Catedral patrimonio de Tod@s, expresó de nuevo su intención de mediar entre el Cabildo Catedral y el Ayuntamiento --este a través de la alcaldesa, Isabel Ambrosio-- para abordar el asunto. Maeztu había señalado en enero que retomaría la solicitud de la citada plataforma, que se entregó acompañada de 100.000 firmas de apoyo. Sobre la titularidad del monumento, reiteró que carece de competencias, pero en la gestión consideró que es posible crear un patronato para regular las actividades culturales y turísticas, sin que ello interfiera los usos litúrgicos. Para la plataforma, es la Junta de Andalucía la que debería «mover ficha», si bien ni la Consejería de Cultura ni el Cabildo Catedral se manifestaron ayer sobre la propuesta. Vuelve un debate que se prolonga desde hace tiempo, con picos de actualidad, como el de ayer, que viene a ser un episodio más. Todas las voces autorizadas, y el Defensor del Pueblo lo es, siguen teniendo sitio en este debate, pero cabe recordar que es un tema excepcionalmente delicado sobre el que se han venido produciendo posicionamientos frontales, y no convendría desatar de nuevo el fuego de las tensiones, abriendo la llave de nuevo a polémicas que pongan a Córdoba en el punto de mira.